A hacer locuras[Roikan]

Las mazmorras, un lugar frio, humedo y lleno de telarañas por las esquinas, y rodeando las antorchas que eran en unico punto luz que alejaba la oscuridad eterna a la que deberian de estar sumidas.

Ahora era un buen lugar para usar mi metamorfomagia, haciendo uso de ella me transforme en un leon de color rojizo, y aspecto infernal.

-Donde quiera la dama.

Ahora que me fijaba, la capucha le quedaba ¿sexy? ¿Porque pensaba yo eso? Ya estaba volviendo a caer.

Aquel gemido que libero me resulto extraño, lo mas probable es que fuera inconscientemente pero eso no era lo que me extrañaba, sino que me resulto ¿sexy? No, no debia de caer en su juego, pero era dificil.

-Todos tienen miedo a algo, por pequeño que sea.-dije mientras caminaba junto a ella.

Un grito resono por las mazmorras. Inmediatamente me transfome en algo que asustaria hasta el mas valiente del castillo, la silueta era identica a la mia salvo que mi rostro era diabolico, mis ojos color rojo, mis manos funcionaban ahora como dos piernas mas y mis colmillos se hicieron mas grandes.

-No le temo a nada, soy la excepcion de la regla.

Lo malo de estar en la forma sanguinaria, como yo la llamaba era que no eras muy sensible a ruidos y demas, cuando Krystal me cogio de la tunica por la pura desconcentracion volvi a mi rostro, por lo visto la gata del celador de pasillos Filch, la señora Norris estaba vagabundeando por las mazmorras.

Me fije donde estaba, a pocos centrimetros del rostro de Krystal, mal lugar, no porque no fuera agradable sino por lo que pudiera pasar, y peor aun lo que paso despues, mis mejillas tomaron un color rojizo.

-Etto...yo....

No consegui decir nada con sentido y cuanto mas hablaba mas me ruborizaba.

Noté como Roi se ruborizo y perdió el sentido de sus palabras, la verdad me gustaba tenerlo tan cerca de mi, me sentia muy agusto, en otro caso me habría sentido excitada con otro chico, pero creo que entre Roi y yo existia una conexion mas importante que la del sexo
-Lo siento.....Era por nuestro bien....Dije colocandole la capucha de la tunica a el tambien mirandole , disfrutando del mínimo contacto de su piel con la mía de nuevo deslicé mis dedos entre los suyos y escodí nuestras manos mientras andábamos entre nuestras túnicas.
-Has escuchado eso....? Dije girandome hacia atrás, se oían ecos de voces que me desconcertabas si estaban lejanos o cercanos

Sentir el contacto de su piel con la mia, hizo que mi temperatura corporal aumentase rapidamente, el minimo roce por pequeño que fuera liberaba algo mas que adrenalina y eso me encantaba, ¿me estaria volviendo a enamorar?

-N-no pasa na-nada.-dije dificilmente.

Escuche aquel grito, instintivamente como iba acompañado, entrelace la mano de Krystal con la mia, poniendome por delante de ella, protegiendola.

-¿No sera...Myrtle?

Hizo un acto de protegerme colocandose delante de mi, y eso me hizo valorarlo, pensar que verdaderamente Roi se pondría el antes en peligro, que ponerle a alguien cercano, le puse las manos en los hombros, apoyando mi cabeza entre medias de su hombro y espalda
-Aquí puede ser lo que menos te esperes Roi......Me apetece ver al trol...¿Qué te parece si le visitamos?

-Jamas vi a uno, no se, me parecen bastante estupidos, y feos, pero si quieres ir a verlo, te acompañare de buen grado, eso si guiame, no se como llegar ahi, si te soy sincero.

Mientras esperaba que me guiara no solte su mano, de hecho no creo que la quitara hasta que fuera necesario, no sabia porque pero me gustaba.

Segui el camino que ella marcaba mientras seguia agarrandole la mano, y ruborizandome cada vez mas, no sabia en que cabeza cabia ir a visitar a una bestia fea, inutil y sucia.

Nada mas llegar el trol dijo algo o por lo menos lo intento, el ingles no era su punto fuerte, cuando golpeo la mazmora hice aparecer mi varita y ataque a la bestia.

-¡Desmaius!

El desmaius poco le hizo, no le dejo inconsciente pero si le dejo en un estado de babia.

-No vuelvas a hablar en un tono tan elevado.

Parecia que eramos dos niños pequeños ella era la que me llevaba y yo me dejaba arrasstrar por ella, y encima estabamos bastante juntos por lo que al minimo roce con su piel me excitaba bastante y no sabria decir cuanto mas podria aguantar.

-¿Q-que quiere hacer a-ahora la d-dama?-pregunte cada vez mas rojo.