Practicando hechizos para las plantas... [Robin Sunset Waltz]

Sentado en un banco cerca de unas macetas que contenian unas preciosas plantas con tonos rosas y amarillo intensos me disponia a abrir mi libro de Herbologia para ver si encontraba algun hechizo que me pudiera ser util y poder practicarlo. Leyendo vi un hechizo muy importante en el cual reparé de inmediato, Aguamenti, que servia para poder emanar agua con la varita. Pense que ademas de ser util para las plantas tambien podria ayudarme con el fuego o en caso de escasez de agua para mi propio beneficio. De inmediato cogi una de las plantas y me puse a intentar el hechizo una y otra vez siguiendo de manera meticulosa cada una de las instrucciones que ponia en el libro.

Los alumnos estaban abandonando ya aquel lugar cuando de repente vi a una dulce chica de mas o menos mi edad que se dirigia hacia la puerta en mi direccion y le pregunte con una voz algo debil:

- Eh! Perdona, ¿Podria ayudarme?¿Sabes si estoy haciendo algo mal con este hechizo de aqui? Es que llevo un buen rato intentando hacerlo pero no veo manera...-dije algo desilusionado ante la perspectiva de no haberlo logrado por mi mismo.

- Estoo,¿Como te llamas?- dije algo ruborizado ante aquella dulce cara que transmitia una tranquilidad y una paz que tanto me gustaba

Había comenzado a socializar, ya no me sentaba sola en el último lugar de la clase, además eso me hacía mal para mi vista. Ahora estaba en el medio o delante del todo y compartía opiniones con mis compañeros, con los que se sentaban a mi lado, aunque no solían hacerlo a menos que fueran de Hufflepuff, de mi curso y edad no tenía amigos, prácticamente ninguno, todos eran mayores que yo.

Había acabado la clase de Defensa contra las Artes Oscuras, ahora me tocaba Herbología y llegué puntual, incluso algunos chicos que acababan de dar clase allí estaban saliendo aún. Correr sin zapatos ya se me daba muy bien y me hacía ser más rápida, mucho más, eso me venía bien por si tenía que huir o darme prisa en algo.

Cuando entré en el invernadero y me dirigí a uno de los asientos, un chico me llamó la atención y me paré a su lado. Necesitaba ayuda con un hechizo, miré su libro cuando me lo señaló y me llevé una mano al mentón, pensativa, mientras que la otra sujetaba los libros.

- ¿Qué deseas hacer exactamente con el hechizo?-le pregunté.- Soy Robin Sunset Waltz.-le sonreí amablemente.

Vi como aquella chica se me acerco, ondeando su suave melena castaño claro y portando una bella y dulce sonrisa que eclipsaba mi interes por aquel libro de hechizos. Cuando me habló, lo hizo con una suavidad y una calma que me hizo sentir seguro, transmitiendome una energia que reanimo las ganas de seguir conociendo a las maravillosas personas de aquel mundo que empezaba a descubrir. Cuando se hubo acercado contemple con mayor seguridad que debia tener mi edad pero para asegurarme me presente como debia hacerlo una persona caballerosa:

- Lo siento, disculpa mis modales y mis formas pero estaba tan metido en el asunto del libro que no me presente como era debido. Mi nombre es Phil Collins encantado.- dije sonriendo.- Esto veo que eres de Hufflepuff, creo que eres la primera persona que conozco de esa casa. ¿Qué edad tienes, Robin?

Vi que la estaba agobiando un poco con tantas preguntas y caballerosidad asi que hice por volver al libro para explicarle cual era mi pregunta y si ella conseguia ayudarme para conseguir lograrlo:

- Pues la verdad no se porque no consigo realizar el hechizo porque estoy siguiendo de forma detallada cada paso del libro. Creo que puede ser del movimiento de la varita. -hice una muestra en direccion a la maceta de la que disponia- ¿Tu que opinas? O tal vez sea que no lo pronuncio demasiado bien.

Vi que ella me miraba con interes como si quisiera ver cuan semejante eramos y aquello solo podia significar que tenia semejanza a ella, que nuestra pasion por aprender cosas nuevas y por esforzarnos en nuestro objetivo de ampliar nuestros conocimientos asi que me dirigi a ella con algo de timidez porque no estaba seguro si estaba siendo algo impertinente o entrometido:

- La verdad es que soy muy luchador y constante en las cosas que me propongo y veo que tu tambien por el interes que has puesto para ayudarme. Gracias.- dije dejando florecer mi sonrisa para mostrarle que mi intencion era entablar una amistad con ella.

El alumno de Gryffindor se presentó amablemente y me causó buena impresión.

- Igualmente, Phil.-sonreí, parecía un chico tímido pero muy simpática y educado. Cuando observó que era de Hufflepuff no pude evitar mirar hacia abajo, hacia mi túnica, para ver el emblema de color amarillo con el pequeño tejón en medio. Reí un poco después y pensé en que yo sí que conocía a alumnos de Gryffindor a parte de él.- Tengo quince, los cumplí hace poco.-dije con una amplia sonrisa, cargada de felicidad. Después volvió su atención al libro que sostenía y me explicó su problema, no le salía bien un Aguamenti. No me gustaba demasiado ese hechizo por razones obvias... Pero a pesar de ello me presté a ayudarle mostrándolo claramente y forzando una sonrisa. Después de que él dijese que se esforzaba en las cosas y añadiera que yo también lo hacía, eso me sentó bien.

Me había fijado en cómo había pronunciado el hechizo y en la realización de su floritura. Phil no estaba seguro de si lo que hacía mal era el movimiento de varita o la pronunciación del hechizo. Yo me di cuenta del error, era lo primero. Me acerqué a él por detrás y tomé su mano, la que sostenía la varita.

- La floritura es ésta.-le dije y después hice un círculo con su mano y agité una vez.

Finalmente, gracias a su intervención consegui realizar el hechizo y con la emocion se me descontroló un poco y moje la mochila. Volvi a probar varias veces hasta que consegui controlarlo. Entonces me fije de nuevo en la chica.

- Muchas gracias. La verdad es que es el primer hechizo que aprendo por mi mismo y todo gracias a ti.-dije con una sonrisa dibujada en todo mi rostro.

Saque mi flauta y me puse a entonar algunas notas para afinarla dado que queria ir mas tarde al jardin para tocarla un rato. Me apasionaba muchisimo la musica y me encantaba tocar la flauta. Era el objeto muggle que mas me gustaba, un regalo de mi padre ya que el no acostumbraba a darme lujos, nunca me regalaba nada magico salvo una escoba pero fue porque sus amigos le habian comprado una a sus hijos y le daba envidia y vergüenza de que yo no tuviera.

- ¿Te gusta la musica?- dije dirigiendome a Robin.

Me puse a tocar una cancion muy cortita para que ella la escuchase. Llevaba ya mucho tiempo tocandola y se me daba bastante bien. Incluso en el mundo muggle una vez se dirigieron a mi y me dijeron que tocaba como los angeles cosa que me motivo mucho mas para continuar el aprendizaje.