Entrenandome un poco (Robin)

(Wiiiii Podemos abrir otro rol y cerrar este porque creo que no hay mucho más que decir. Y tú estás de buenas con la anciana violadora T___T)

Asentí con la cabeza cuando se separó de mí y al siguiente abrazo que me dio le correspondí, más tranquila esa vez.

- Te lo prometo.-dije. La idea de sufrir no me agradaba tampoco y yo siempre intentaba protegerme cuando tenía problemas, que era muy a menudo porque solía meterme en peligro por ser como era y pensar como pensaba. Y por ser completamente sincera.

Me separe de ella, y finalmente me levante, le tome de la mano e hice que ella tambien se levantara,le mire a los ojos con una sonrisa y finalmente la subi a mis hombros,ya en esta forma, comence a caminar para ir haia el castillo,deberiamos de alejarnos de este arbol durante un tiempo, no queria que se lastimara....y bien...pues serviria que los demas se dieran cuenta de que ahora era como mi pequeña hermana....y tambien comer algo por que no...jaja

-Bien...vamos hacia el castillo...tengo ganas de un panquecito....-


(bien...entonces..abres tu! que este lo abri yo! jejej xD)

Finalmente, Kyle se levantó y me ayudó a mí a hacer lo mismo dándome la mano. Me sonrió y yo hice lo mismo, poniéndome un poquito colorada. Después me tomó por sorpresa que me cogiera y me sentara sobre sus hombros. Me agarré bien a su cabeza, asustada. Aún seguía teniendo vértigo con la única excepción de ir montada en escoba.

- Yo también tengo hambre.-dije con una vocecilla.

El vampiro se paró un momento, me sujetó más fuerte sin hacerme daño y volví a retomar la marcha.

- Confío en ti, pero no en la dureza del suelo. Me da mucho miedo la altura, pero ya me acostumbraré. Como me acostumbré a montar en escoba.-finalicé con sinceridad.

Me quedé un rato callada hasta que me di cuenta de algo.

- Oye, ¿Desde cuándo los vampiros comen algo que no sea sangre?-inquirí.

- Oh...-murmuré. Yo sabía que los vampiros dormían, lo que no sabía era que no lo necesitaran, y también desconocía que los vampiros podían comer cualquier cosa. Además parecía que a Kyle le gustaban mucho los panqueques.

Se me ocurrió una idea que me hizo sonreír ampliamente.

- Kyle, un día te llevaré a mi casita.-dije acariciándole el pelo mientras él seguía caminando.- Y te haré panqueques yo misma. Una bandeja sólo para ti.

Casi inmediatamente después de decir lo que dije, Kyle dio un salto y me agarré con más fuerza a él, a la desesperada alcancé a taparle los ojos con los brazos, y apoyé el pecho en su cabeza, sintiéndome así más segura.

Me hizo gracia su incredulidad y solté una risita alegre y suave. Después me separé un poco de él y le revolví el pelo con una mano.

- ¡Pues claro que sí, tonto!-exclamé y me eché a reír de nuevo.

Kyle seguía caminando hacia el castillo y ya estábamos en las escaleras en dirección al comedor.

- No seas impaciente.-reí. Me soltó una pierna para llevarse una mano al bolsillo y volví a agarrarme a él como si me fuera la vida en ello.

Acepté lo que me ofrecía y cogí un trozo de chocolate.

- Gracias, hermanito.-dije y me eché a la boca el chocolate.- Oye, creo que cuando lleguemos no habrá panqueques... Pero podemos ir a ver a los elfitos en las cocinas y seguro que nos dan algo rico.-propuse con alegría, los echaba de menos.

- ¡Oh, qué bien! ¡Vamos a ver a Dobby!-exclamé con felicidad. Por un momento me olvidé de que seguía sobre los hombros de Kyle y me solté de su cabeza para dar palmaditas rápidas y fuertes con felicidad.

Finalmente llegamos al comedor y me dejó en el suelo para mirar hacia las mesas, seguramente que en busca de panqueques, yo me acomodé las gafas pero no vi nada de todos modos, no distinguía las cosas desde muy lejos. Supongo que su condición de vampiro sí que le permitía aquello.

- Venga, hermano, vamos a ver a Dobby.-dije con impaciencia y tiré de su muñeca escaleras abajo para ir a la cocina.

Off.- Manito, perdona por haber desaparecido u.u Dame tu correo por MP y así me tienes más controlada

Teniendo en cuenta la velocidad a la que íbamos llegamos enseguida a las cocinas y me emocioné aún más al ver a todos los elfitos, que parecían estar más tranquilos, ya habían terminado de hacer la comida, era lógico.

- No importa, eres un vampiro ¿Verdad? No creo que te hicieras daño por caerte por unas escaleras. Ni siquiera yo perdí el equilibrio.-dije y después solté una risita. Miré a todos lados con impaciencia.- ¿Dobby? ¿Y Dobby?-pregunté en voz alta. Algunos elfos me miraron mal, otros me ignoraron.

- Robin Sunset Waltz...-dijo una voz aguda y la pequeña criatura se dejó ver de entre la oscuridad del lugar.

- ¡Dobby!-exclamé y corrí hacia él para arrodillarme a su lado y lo abracé.

¿Qué estaba diciendo Kyle? ¿Quería hacer daño a Dobby? Me abracé con más fuerza al pequeño elfo mirando a Kyle con algo de miedo.

- Kyle...-murmuré, asustada. Dobby se separó de mí suavemente con gesto serio en su carita, podría decirse que incluso estaba enfadado. Alzó un brazo y chasqueó los dedos. Una tarta apareció de la nada y se estampó en la cara del vampiro. Lo miré perpleja un momento y después me eché a reír. Dobby me miró y empezó a reírse también.- Mira, Kyle, ya tienes un panqueque.

Kyle se quitó el plato de plástico que había estado sosteniendo la tarta antes de que ésta hubiese sido estampada contra la cara de mi hermano. Luego vi cómo su lengua lamía y limpiaba la zona alrededor de sus labios y después acababa de limpiarse con su varita.

- ¿De verdad, señor Kyle Owen?-inquirió Dobby dejando de reír un momento.- Mis disculpas entonces. Aquí tiene un brownie.-el elfo doméstico volvió a chasquear los dedos e hizo aparecer un brownie.- ¿Y usted qué desea, Robin Sunset Waltz?

- ¿Puedo tener yo un brownie también? Con mucho chocolate, por favor.-dije dando palmaditas, impaciente. El elfo asintió sonriendo amablemente e hizo aparecer un pastelito para mí. Lo cogí.- ¡Muchas gracias!