Leyendo tranquilamente (Robin)

Estaba sentada cerca del lago, de vez en cuando tiraba una pequeña piedra al agua para que se crearan ondas en ellas. Leía Cumbres Borrascosas, uno de mis libros favoritos, me lo había leído tantas veces que me sabía textos enteros y el libro ya estaba bastante desgastado, tanto que al abrirlo por una página ya se quedaba en ella.
Cerré el libro, suspirando, tenía un pequeño problema y no podría seguir dejándolo pasar por alto, yo... con ese tipo de temas no era muy buena, más bien, era un desastre cósmico. Me tumbé boca arriba, cerré los ojos y me puse a pensar que podría hacer.

Terminado. Al fin había leído la última palabra de la última página del libro sobre Grindylows, me había gustado mucho y ahora quería poner mis conocimientos a prueba. Sabía perfectamente cómo podía hacerlo, así, tomé el libro entre mis manos y salí dando saltitos al jardín. Sentía el frescor del césped en mis pies, cada vez más al acercarme al lago.

Sabía que aquellas criaturitas no se sentían muy a gusto con humanos cerca, por eso tendría cuidado de no asomarme mucho a la orilla. También podría mirar desde mi escoba, pero no me parecía tan buena idea. Preferí arrodillarme junto al lago y mirar hacia el fondo tras colocarme bien las gafas.

Oí pasos acercarse al lago, abrí los ojos y miré hacia donde había una chica arrodillada junto al lago, me pregunté que es lo que estaría haciendo, me entró mucha curiosidad, así que cogí mi libro y lo guardé en una pequeña mochila que llevaba. Me acerqué un poco a ella, hasta quedar a medio metro de distancia. ¿Qué estaría mirando con esas gafas en el lago?

- Hola, ¿qué haces? Si se puede preguntar, claro - pregunté curiosa a la chica de... Hufflepuff. - Soy Lilieth - enseñé una sonrisa tímida y me acerqué hacía ella hasta quedar justo detrás de ella y me asomé un poco a la orilla para ver eso que parecía tan interesante.


(OFF: Vale, record para mí T_T He tardado demasiado en postear... sorry)

(No pasa naaaada)

No veía nada, estaba demasiado oscuro, por algo se llamaría Lago Negro. ¡Pero yo quería ver gryndilows! Bueno, sería mejor así, esas criaturas eran peligrosas y luego se enojarían conmigo por provocarlos, aunque fuese indirectamente. Entonces escuché la voz de una chica, la que había estado leyendo hasta mi llegada allí.

Me giré hacia ella cuando se puso tras de mí y me coloqué las gafas ya por inercia, como hacía siempre, luego me levanté y asentí con la cabeza con una sonrisa en el rostro.

- Hola, yo me llamo Robin.-me presenté.- Estaba intentando ver algún gryndilow, son tan monos...

- Encantada Robin. ¿Gryndilow? ¡A mi me encantan! ¿Ha habido suerte? - pregunté entusiasmada. - Si quieres te ayudo, yo no tengo nada que hacer, aunque... con lo oscuro que está hay dentro... dudo que se pueda ver algo tan siquiera... - me asomé al agua, cosa que hizo que perdiera el equilibrio y por poco cayera al agua, por suerte conseguí echarme hacia atrás a tiempo.

- Uf... por lo pelos - dije mientras me apartaba el pelo de la cara y en mi rostro se asomó una sonrisa de alivio. - Soy muy torpe. - Miré hacia el libro sobre Gryndilows, yo me lo había leído hacia dos años por Navidad como lectura ligera.

Sonreí con sus preguntas, estaba tan entusiasmada como yo. Luego se asomó al lago para comprobar si veía lo mismo que intentaba ver yo, pero estuvo a punto de caerse dentro del lago y fui a ayudarla cuando ella volvió a recuperar su postura inicial. Respiré hondo, aliviada.

- Ten cuidado, Lilieth, sería mejor si no te cayeras ahí dentro.-luego decidí cambiar de tema.- ¿Te encantan? Son muy bonitos, lástima que no le gustemos, suelen estar en el fondo o en las medianías... Creo que atacarían si ven movimiento en el lago.

(OFF: ¡Viva la tardanza! xDD)

Suspiré, un poco más y al agua pato. Sonreí. - Sí, los gryndilows me parecen muy curiosos. Es una pena, sí, a lo mejor si no ven movimiento peligroso, sino el movimiento de algo que ya está en el agua, no nos ataquen.-

Me paré a pensar sobre lo que había dicho, sería algo difícil, aunque tal vez no si uno lo pensaba detenidamente. Miré a Robin de nuevo y sonreí. - Podríamos intentar que salgan de las profundidades para poder verlos, lo que no sé, es cómo. ¡Claro! Lo que has dicho, puede que ataquen, entonces podríamos aprovechar el momento para verlos de cerca. - Era un poco descabellado, pero era lo único que se me ocurría que podría resultar eficaz para verlos.

Negué con la cabeza ante su primera teoría.

- No, los grindylows son muy listos, huelen a los humanos. Aunque a veces no están en la superficie, porque hay gente que nada en el lago.-me expliqué recordando el torneo de los Tres Magos. Ella se quedó en silencio, como si estuviera pensando. Yo estaba contenta ¡Había encontrado a alguien que compartiera el mismo interés que yo en los grindylows! Finalmente habló, exponiéndose su idea. Me parecía algo muy peligroso pero también interesante.- Puedo hacer de señuelo para que venga alguno y después... Tiras de mí y le haces un Petrificus Totalus al grindylow. Pero... Ten cuidado, no me gustaría hacerles daño.-dije con un poco de preocupación. Me preocupaba más que sufrieran ellos que el hecho de que pudieran ahogarme. Recordé que tenía una cuerda en el baúl por si las puertas del armario se abrían solas.- Accio cuerda.-la cuerda no tardó en llegar a donde estaba y la cogí al vuelo. Me la até alrededor de la cintura.- Tira de mí si hace falta.