Y que malo es el viento [Daniel Black]

Habia subido a la torre a contemplar las estrellas, hacia una noche estupenda, la luna estaba casi oculta por lo que las estrellas formaban un precioso baile sobre el cielo.

Al llegar a la parte superior de una de las torres iba a dirigirme hacia la ventana para salir hasta el tejado cuando la sombra de una chica me sorprendio... "hola" dije con una sonrisa

Mire un poco contrariado a aquella chica... “Lo siento, si soy miembro de la casa Huff...” volví a fijarme en el rostro de la chica... “Tu también eres de mi misma casa ¿no?” pregunte al darme cuenta que su rostro me resultaba conocido...

Baje el rostro “Perdona, creo que no he sido muy cortes en mi presentación...” me agache y cogí un trozo de lazo que había en el suelo... “Creo que es tuyo, me llamo Daniel, Daniel Black”

Mire a los ojos otra vez a aquella chica... “Creo que ahora lo hice mejor ¿no?” dije sonriendo... “no soy mucho de presentaciones y menos a la luz de las estrellas...” dije sonriente...

Sonreí como solía hacer casi siempre... “Bueno creo que hace una noche estupenda para mirar las estrellas, y bueno, a ello iba cuando te vi...”

Me acerque a ella... “No suele haber mucha gente por aquí por las noches... bueno hay algunos estudiantes buscando intimidad...” dije sonrojándome... “Pero bueno no soy de incordiar mucho, por lo que solo vengo cuando como hoy la luna permite ver casi todo el cielo...”

Sonreí... “Me gusta subirme al tejado y tumbarme a mirar las estrellas...”

“Parece que te gusta mirar las estrellas...” dije mientras señalaba el telescopio...

Escuchaba con alegría sus palabras... “Creo que es una preciosa afición que compartir, después de todo, pese a la distancia las estrellas son las mismas y las sensaciones se comparten al igual que los sentimientos...”

Mire a aquella chica sonriendo “Miedo al tejado no tengo, a caer por el...quizás algo” dije mientras reía... “Pero vamos es seguro y desde aquí solo ves una ventana del cielo, alli puedo contemplar todo el cielo, además es más cómodo estar tumbado”

Me asome por el ventanal... “Si creo que prefiero verlas más chiquitas pero sin cristal por medio.....”

Ariel le sonrió ampliamente ante su comentario.

- Yo también creo que es una afición muy bonita.

Escuchó atentamente lo que le decía sobre el tejado y una punzada de envidia la recorrió, se acercó al ventanal y el viento volvió a remover su pelo, haciendo que el mechón rebelde la molestara de nuevo y se enojará con el susodicho. Volvió a colocarlo en su sitio y este volvió a salirse.

Observó al chico y antes de empezar a hablar, sus mejillas se colorearon levemente.

- Este... yo... podría... ¿te importaría si yo... viera el cielo contigo en el tejado? - preguntó con cautela y tenía que admitirlo, algo de miedo.

(Off Rol// Me ha costado que viniera la inspiración o.o)

Of.... Perdóname a mi por la tardanza llevo unos días liados xDDDD

Vi como se movía su cabello y le tapaba el rostro, con cariño tome una de las gomas del pelo que me gustaba coleccionar y que siempre llevaba en la muñeca y se la ofrecí... “Seguro que te es mas útil que a mi...”

Me acerque a la ventana y disfrute del viento que movía mi cabello y sonriente volví a entrar la cabeza ... “Claro que puedes venir, las cosas bellas de la vida son para compartirlas, y creo que las aficiones también...”

Volví a sacar la cabeza y la mitad de mi cuerpo por la ventana... “Ven...” dije ofreciendo mi mano a aquella chica... “no tengas miedo, no esta resbaladizo y seguro que te gustara sentir el frescor de la noche en el rostro...”

((Off Rol// No te preocupes ^^))

Observó la goma y tardó unos segundos en cogerla.

- Gracias, eres muy amable, tengo un mechón al cual le gusta meterse en mis conversaciones - comentó, eso era algo que su amigo Chuck había dicho un par de veces

Volvió a mirar la goma del pelo que ahora estaba en su mano, no estaba acostumbrada a usar ese tipo de coleteros, ella solía utilizar lazos, pero alguna que otra vez los había usado, de modo que al principio con algo de torpeza, recogió su pelo en una coleta alta.

Ariel miró unos segundos hacia fuera antes de aceptar su mano.

- Soy un poco torpe, así que no me extrañaría que me cayera, aun sin ser resbaladizo - dijo medio en broma, lo cual quería decir que la otra mitad iba en serio.