Como siempre, iba a muy buena hora para impartir la clase que me correspondia, la de pociones.
Atravese los pasillos con un paso lento hasta llegar a uno de los ultimos pisos del castillo que eran la mazamorras. no me gustaba mucho este espacio, asi que iba a hablar con la directora para ver si podiamos transladar la clase a otra aula no tan fria.
Cuando llegue , ya se encontraban dos alumnos en el interior.
- Buenos dias señor Cole - salude al que ya conocia - es agradable que se haya inscrito en esta clase señor hoffman - salude al recien llegado dedicandole una sonrisa.