Mordiendo (sombra)

Me fui a dar un paseo, despues de un dia muy largo, las clases y demas me cansaban... Fui andando, hasta que llegue al bosque prohibido, me encontraba en un circulo lleno de arboles, intente uir , pero no se veia casi nada por todos los arboles que avia.

-Lumos - dije, de mi varita salio una luz, alumbro donde estaba, me movi por todos los lados intentando ver alguna salida, no encontraba ninguna, alfinal me canse de tanto moverme acia todos los lado, y me sente en el suelo.

La oscuridad se cernía sobre el Bosque Prohibido.
Hacía años que no regresaba a Hogwarts, pero siempre que había ido, me había cobrado alguna víctima...
¿Y qué mejor que buscar entre los árboles para encontrar alguna presa fácil y despistada?

Caminé con los cinco sentidos alerta, oliendo el aire a la espera de alguna persona que me sirviera de alimento aquella noche.
Y no me equivoqué, al cabo de un tiempo encontré a un chico sentado en medio de la nada.
Sonreí sádicamente y me acerqué a él, caminando con una elegancia inhumana.

La luz de su hechizo me alumbró, mostrando una etérea figura femenina oculta por una capa negra, de largo pelo oscuro, piel marmórea y ojos refulgientes del color de la sangre, tan rojos como sus labios.

- Vaya, vaya... - canturreé, acercándome al joven - Parece que te has perdido...¿Estás... solo?

-si me e perdido y estoy solo, ¿quien eres?-dije asustado.

Reí siniestramente y di un par de vueltas a su alrededor, analizándole. Se me hacía bastante apetecible, si...

- ¿Qué quién soy? - pregunté divertida - Me han llamado de muchas maneras a lo largo de los tiempos... Tantas, que ni las recuerdo...

¿Estaba solo? Genial, así nadie lo echaría en falta por un buen rato...
Me paré entonces frente a él, mirándole directamente a los ojos.

- Pero después de esta noche... me temo que te dará igual mi nombre...

Mordí mi labio inferior con anticipación, ¿Lo torturaba? ¿O me alimentaba directamente?
Difícil elección, porque ansiaba probar ya su sangre...

-alejate de mi - dije pusiendo mi varita en su pecho - Depulso

Paré su hechizo con un rápido Protego, alejándome unos pasos.

- ¡Qué divertido! - exclamé con ironía, mostrando una amplia sonrisa que enseñó mis colmillos - Me encanta jugar con la comida.

Y en un veloz movimiento de varita le lancé Locomotor Mortis.

Me lanzo el Locomotor Mortis, porque se juntaron mis piernas hasta que me cai, me levante rapido y dije:

- ¿no te an enseñado a que no ay que jugar con la comida? - dije - Everte Statum

Resoplé con diversión y rápidamente me moví, desapareciendo de enfrente suyo para colocarme detrás, mi varita apuntando su cuello. Su hechizo ni siquiera me había rozado.

- ¿Y a ti no te han enseñado que para alcanzar a un vampiro necesitas mucho más que velocidad? - susurré contra su oído, mi aliento cayendo sobre su piel.

Inhalé su delicioso olor.

- Dime... ¿no te llama la eternidad? - le pregunté en palabras suaves e hipnotizantes - ¿Ser un ser superior por encima de los humanos...?

- te lo dije... alejate de mi - me di la vuelta muy rapido - oye, ¿se puede morder con la lengua pegada? lo dudo, Palalingua

(off: aora vengo me voy un momento)

Sonreí por su inútil hechizo. Me había dado, efectivamente, pero me deshice sin problema de sus efectos. Lo único que había logrado había sido provocarme. Mis ojos destelleaban ahora de enfado.

Llevé rápidamente una mano a su cuello, estampándolo contra un árbol y alzándolo unos centímetros por encima del suelo.

- ¿Y tú crees... que podrás respirar si te rompo la garganta? - pregunté siniestramente, mi mirada taladrando la suya.

Con mi mano libre agarré su varita y la retuve junto con a la mía.

- Podemos probarlo... ¿no te pica la curiosidad?

Mis dedos cerraron su agarre, apretando un poco más.



(Ok, a mi se me había atascado el ordenador XDDD)

(ya toi)
Sus dedos me apretaban mucho.

-y ¿que quieres? - dije itentando soltarme.

(Vuelvo a no tener tiempo, lo siento, acabo en este post y ya ^^)


Sonreí ante su pregunta.

- Es evidente, ¿No crees? - le pregunté, mis uñas clavándose ahora en su pálida piel, haciéndole sangrar - Quiero alimentarme.

Dicho esto giré su cabeza con brusquedad y mordí su cuello, bebiendo... bebiendo...
Hasta que la falta de aquel líquido vital sumió al chico en la inconsciencia.
Una vez sacié mi sed, solté con violencia el cuerpo del joven, el cual cayó sobre la hierba como un muñeco inerte.
Pasé la lengua por mis labios y borré cualquier rastro de sangre. Luego, sonreí.

- Disfruta de la eterna oscuridad, pequeño... la vas a aborrecer.

Y tras susurrar aquella sentencia, desaparecí como una sombra entre los árboles.



(Ya está XDD eres un vampirillo, querría haberle dado algo más de emoción con alguna tortura (así luego podrías ir diciendo lo que soportaste y tal...) pero sé que tienes prisa, así que, ahí tienes =) )

(claro, un poco de prisa tenia, pero tanta, no xDDDDDDDDDD, bueno gracias ^^)