Pequeña lucha (Libre)

Se encogió de hombros, sin perder la sonrisa.

Trabajaría en el Ministerio, de secretaria sexy -le guiñó el ojo y volvió a reírse- No pierdo demasiado el tiempo pensando en qué seré, prefiero pensar en el presente.

-Secretaria Sexy...das el papel.-rei.-Seguro que te ascenderan.-volvi a reir.-Yo pienso igual que tu, vivir el presente y si puedo, el futuro.

Se rió junto a él, dándole un leve codazo de amistad, y asintió a sus palabras con la cabeza, sonriéndole leve acordándose de todo lo que él le había contado sobre lo que le había pasado.

Suspiró.

Con Quién-no-debe-ser-nombrado por aquí, los días nunca sabes cómo terminarán, ¿verdad? -miró el cielo, que Voldemort había vuelto era un hecho, todos estaban atentos por cuando diera el paso definitivo.

Dio un respingo de metro y medio, casi cayéndose del banco al escuchar sus gritos... Una fina capa sonrosada acaparó las mejillas de Lisa, y miró alrededor.

Oye... No deberías gritar así... -le decía algo azorada, frunciendo el ceño...

Lisa no es que tuviera miedo de Voldemort, o sí, el caso es que no le gustaba decir su nombre.

Aunque no lo temas no puede oírte, así que es estúpido ponerse a gritar -respondía mirándolo y suspirando- No, no le temo, supongo... Quizás sí.

Nunca se había encontrado con él, y aunque quería estrujarlo hasta matarlo, sabía bien que si se lo encontraba, seguramente quedaría paralizada de miedo.

-Llegara un dia en el que le veas...tendras que saber si le temes o no...-dije riendo y poniendo voz de un espectro.

Se rió y le dio un suave empujón que ni siquiera lo movió del sitio.

No hagas eso, tonto, que no me gusta.

(Voy al trabajo, vuelvo aprox las 21)

-¿Y que es lo que te gusta, quiza...las cosquillas?-dije haciendole cosquillas en los costados.

¡No! ¡Odio las... las...!

Y ya se estaba meando de risa, intentando coger los brazos de Roi para apartarla de ella, mientras luchaba contra sus manos y a la vez intentaba no caerse del banco.

-Pues no lo parece¿...las odias...o no te gustan tanto que no puedes soportarlas...?-dije haciendole a un mas cosquillas.

¡Paraaa!

Al final conseguía liberarse de sus manos cogiéndoselas con fuerza y mirándolo a los ojos, con aquella sonrisilla nerviosa y los ojos vidriosos, con algunas lágrimas de la risa.

No me hagas más cosquillas... -le advertía.

-¿Porque? ¿Acaso no te gusto?-dije aun con las manos aprisionadas por las suyas.

Negó convencida con la cabeza, moviéndolo de un lado a otro.

¡No! ¡Nada de nada! -pero no podía dejar de sonreír, estando apoyada con la espalda encima del banco.

¡Pues creetelo! -exclamó ya levantándose y dando un salto para ponerse de pie en el banco, con una sonrisa divertida.

Lo miró con curiosidad, sentándose a su lado y mirándolo a los ojos unos instantes... Luego miró hacia otro lado, y suspiró, se había puesto seria:

Al pasado.

Es que si no especificas... -dijo para picarlo, sonriendo.

Se lo quedó pensando un momento... y finalmente, sacó la lengua picarona.

¿En Hawaii tomando el sol?

-Vale, has hecho tu eleccion.-silbe al aire.

Shion aterrizo a gran velocidad y me subi en ella.

-Vamos monta.-dije con una sonrisa extendiendole la mano.

Observó la enorme dragona alucinando de nuevo... Y le dio la mano a Roi para subirse a su lomo y agarrarse a la cintura de él.

Al final me voy a enamorar de ti* -dijo con una sonrisa, más sincera que de broma.

(*Y te lo estás ganando a pulso xDDDDD)

(Que se le va a hacer )

Respondi a su sonrisa, ¿lo decia enserio?

-Bien, vamosnos Shion.-dije tocando su lomo.

Shion alzo el vuelo y cuando estuvimos a varias decenas de metros dije:

-Ya sabes donde llevarnos, Velocite Maxima.

En poco menos de diez minutos a unas velocidades astronomicas llegamos al destino.

Shion freno su velocidad.

-Buenos dias viajeros, agradecemos su viaje con Aerolineas Shion, hemos llegado al destino, saludos, el piloto Roi.-dije riendo.

Las hermosas islas Hawaii estaban sobre nosotros, descendimos y Shion aterrizo en tierra y reduje su tamaño hasta que parecia una pequeña lagartija.

¡¡¡Es Hawaii!!!

Gritó alzando los brazos totalmente alucinada...

¡¡¡Vamos a bañarnos!!! -lo cogió del brazo y lo arrastró en busca de una calita solitaria... A falta de bikini, tocaba ropa interior.