Una conversación de pasillo. [Chloe Bingley]

Chloe soltó un suspiro de resignación, a veces creía que la única que la escuchaba era ella misma. Eso, o la Slytherin tenía memoria selectiva y sólo se acordaba de lo que ella le interesaba, en otras palabras, lo que ella misma decía. Al final venía a ser lo mismo.

-Serpientita, mi plan es infalible, ¿no te acuerdas que le voy a hechizar antes de que entre al Gran Comedor?, en cualquier caso, estaré alerta a otros posibles atacantes que me quiten la diversión- explicó- además, como buena serpiente, se creeré intocable y no va a estar muy alerta que digamos.

Llegaron al Comedor, les había costado seguirlos a una distancia prudente pues constantemente se unía más gente y era difícil mantener la distancia. Por suerte, cuando llegaban al Gran Comedor la gente se separaba un poco y era más fácil. Cuando por fín llegaron Chloe sonrió y preparó la varita.

-Levicorpus- dijo a mediana voz. El chico se alzó volando y se quedó cabeza abajo en plena entrada. Chloe lo miró desde abajo sonriendo.

-Eso te enseñará a no lanzar Diffindos por el colegio. Me debes una mochila nueva, te mandaré los restos de la anterior para que veas cual quiero. Más te vale comprármela, o la próxima vez será mucho peor- le aseguró con una sonrisa mientras entraba en el Gran Comedor y la gente se reía del chico colgado.

Arianne ve al chico colgado y con un poco de esfuerzo logró controlar la carcajada que deseaba salir. Caminó hacia el Gran Comedor, y al pasar al lado de la serpiente sisea para que sólo él pueda escucharla.

—Eso te pasa por no actuar como un verdadero Slytherin, cariño.

Idiotas. Ese es el problema de esos chiquillos. Creen, erroneamente, que porque están en la casa de las serpientes son impunes. Ir molestando y hechizando a todo el mundo es un acto inmaduramente estúpido, nada favorecedor a la casa de la que se sienten tan orgullosos.

Las risas se expandían por el Salón y la rubia chica se encuentra con la Ravenclaw ahí. La mira divertida y le dice irónica.

—Me imagino lo... orgullosa que debes estar por atraparlo.

Chloe le sonrió irónica a la Slytherin para corresponderle con su tono de voz, no podía ser menos que ella.

-Pues sí, ciertamente, estoy muy orgullosa de haberlo pillado, me parece que he hecho un buen uso de la hora en la que debería estar en Pociones, espero que te hayas divertido en esta hora, seguro que ha sido más emocionante que la clase que tenías, esto confirma mi teoría de que para aburrirte en una clase, mejor no vayas- añadió sonriendo.

-Si me disculpas me voy a comer a mi mesa, en la tuya me tienen cada día menos aprecio- dijo sarcástica- hasta otro día serpientita.

Chloe se dirigió a su mesa para comer.