Trabajando, aburrida. [libre]

Era extraño, la tienda de dulces estaba casi vacía. Eso no era normal.

Momentos antes, me encontraba reponiendo las Ranas de Chocolate, una de las golosinas más vendidas. Pero ya había acabado con eso, y no tenía nada más para hacer. El piso casi que dañaba los ojos con tan sólo mirarlo, de tan brillante y limpio que se encontraba.

Apoyada con ambos codos sobre el mostrador, resoplé con aburrimiento, logrando que el aire que emanó de mi boca hiciera volar un mechón de cabello que me hacía cosquillas en la nariz.

¡Golosinas!
Entré en la tienda dando saltitos.

-¡Hola, Lara, no sabía que trabajaras aquí!-exclamé.-¿Me dejas una caja grageas Bertie Botts y una rana de chocolate?

La campanilla sonó y al segundo siguiente una voz que me resultaba familiar me saludó.

- ¡Robin! - exclamé, contenta, incorporándome. Ya estaba sintiéndome demasiado sola.

- ¿Cómo estás? ¿En busca de golosinas? - le pregunté con una gran sonrisa en el rostro mientras buscaba lo que me había pedido.

-¡Sí! Nunca he probado las golosinas mágicas.-dije dando palmaditas en el mostrador y saltitos.-Me han dicho que hay grageas de todos los sabores inimaginables, espero que no me toque una con sabor a vómito.

Una chica que parecía mayor que yo entró en la tienda e hizo su pedido.

-¡Hola!-exclamé.-Estudias en Hogwarts, ¿Verdad? Creo que te he visto. ¿Te gustan los pica-pica? A mí, me gustan más las cosas suaves.-luego solté una risita.

-mmm si clase de DCAO chiquilla- le dije recordando como le decia en esa clase-y bueno a mi me gusta lo picante, lo suave cas no me va-

-Todo el mundo tiene sus gustos.-sonreí.

- si supongo que tienes razon- y le devolvi la sonrisa

-Bueno...-dije encogiéndome de hombros.-Mi madre me dice que siempre tengo razón cuando doy mis argumentos, aunque no sé porqué. Yo también me equivoco.

-si creo que todos nos equivocamos, pero talvez dice eso porque eres muy sincera y vaz al grano-

Me quedé pensando.

-Quizá.

(Off.-¿Y esto? O.O no sabía que estaba esto aquí)