Recuerdos olvidados [Chuck Roswel]

Chuck había estado un par de días fuera de Hogwarts, el tema de su madre desde la noche de la discoteca le inquietó lo suficiente como para que se fuera a saber de ella. Al parecer las cosas no habían salido muy bien.
Tras llegar a su casa, Chuck no encontró nada ni nadie, ni si quiera una nota se madre. La cosa estaba totalmente desbalijada. Los que entraron en ella buscaban algo. Chuck intentó ver si su madre había dejado una pista de donde había ido. Tenía pinta de que su madre sabía que alguien iría a su casa y por eso ella desapareció justo a tiempo.

A los dos días de volver Chuck a Hogwarts sólo esperó a que su madre consiguiera ponerse en contacto con el. Mientras andaba por los exteriores, dicidió ir al lago, donde muchas veces iba a pensar.

Cuando llegó vio a alguien que aparentemente le sorpredió que estuviera allí. Era Ariel, y estaba ecima de un árbol. Al parecer tenía magulladuras en la cara, y una mano vendada. ¿Qué le habría pasado?. Chuck se acercó y lo único que supo decir fue un seco: - Hola -
Ni si quiera la miró, tan sólo se quedó mirando el lago.

Tras su pregunta dije: - Bueno, he estado mejor... - Chuck seguía hablando sin mirarla. - He estado lejos de aqui. No se nada de mi madre - Mis palabras eran como si estuviera leyendo un telegrama. Concisas y monótonas sin ningún tipo de entonación. - Por lo que veo llegaste bien al colegio - Dije haciéndole mención a la noche en cuestión.

Chuck escuchó las preguntas sobre su madre, y tenía razón no tenía la más minima intención de contar nada con respecto a ese tema. Luego su segunda pregunta fue algo más inquetante.
- Ah, que al final fuiste a la casa de los gritos?, al menos sigues viva- Seguí diciendo sin inmutarme. -Y al parecer estuviste con alguien, que no recuerdas, como toda esa noche, debo suponer...- seguí diciendo.

Ahora Chuck si la miró, y con un tono quizá mas fuerte de lo normal comenzó: - Salimos de la discoteca a la que fui contigo por que me lo pediste, allí tu amigo pasó de ti porque estaba con otra, salimos y te llevé a Covent Garden, bebimos, jugaste conmigo, supongo que te arrepentiste y te mandé en un taxi hacia hogwarts...lo que pasara después la verdad es, que ni lo se... ni me importa mucho- Acabé hablando de manera borde.

Me moví un poco para que callera y dije: - Ariel, siempre te has quejado de los chicos que te han robado besos, pues esa noche hiciste lo mismo conmigo. Se que tienes la excusa del alcohol en tu manga, pero eso no quita que yo siga molesto. - Terminé diciendo. - Así que, al parecer luego fuiste a la casa de los gritos..., a saber lo que hiciste - Seguió diciendo, de nuevo sin mirarla.

-yo no he dicho nada de que te besara, parece que ya recuerdas no?- Seguí diciendo sin mirarle. - Explicame entonces por qué lo hice- Se quedó callado y siguió. -sabías que podía pasar, estuviste jugando conmigo, estuviste tan cerca de mi, apenas me rozabas con tus labios... qué quieres Ariel?!, si no te hubieras acercado tanto, nada de esto hubiera pasado y por supuesto en el beso de después ya no tengo nada que ver- Se quedó mirando el paisaje.- Lo sabías... sabías lo que hacías.-
Chuck tomó la nota, la leyo y dijo: - no te haces una idea de como me quedé... de como me dejaste después de eso... por qué?, por qué lo hiciste?. Yo no te gusto, por qué jugárnosla de esa manera?, que tenías en mente? que querías probar?... - andé unos pasos más hacia alante, hacia una piedra, y me senté en ella.

Chuck en ese momento sí se giró y sólo dijo: - Ariel, espera- Se quedó de pie, esperando que Ariel, se girara. - Está bien, lo siento.. - Se quedó pensativo esperando, la reacción de Ariel. A pesar de que estaba molesto, con Ariel había hecho una bonita mistad, y creía que no era suficiente motivo para perderla.

Chuck titubeó un momento, y se acercó muy despacio a ella. Solo dijo: - Sabes?, estaba recordando cuando te llevé a volar con escoba... me lo pasé genial contigo-
Chuck llegó a su altura y sin pedir permiso ni nada, fue a ella y le abrazó. Y tras darle un fuerte apretón le dió un beso en la cabeza. Y le dije: - Yo también te quiero pequeña -

La escuché y dije: - Desahogate Ariel, sabes que conmigo puedes... - Me quedé pensativo, sabía que esas lágrimas no eran sólo de nuestra discusión. Había pasado algo más, pero ese no era el mejor momento de preguntarle. Le di otro beso más esta vez en la mejilla y la volví a abrazar.
Sabía que si conseguí sacarle de nuevo una sonrisa sería más facil así que inventé una broma con la que no sabía si conseguiría mi objetivo.

-Ariel, venga no llores, que no besas tan mal!, besas bien!- Sonreí un poco esperando que hubiera conseguido algún progreso.

Ariel alzó el rostro hacia el chico ante su comentario

- ¡Eh! - se quejó - no seas malo conmigo.

Entonces recordó algo, aunque no quería preguntarlo en ese momento, pero debía hacerlo, quería sacarse esa pequeña espinita.

- Oye, sé que no es el mejor momento para preguntarlo, pero ¿paso algo mas aquella noche? ¿Algo que hiciéramos o dijéramos? Tengo la sensación de que he olvidado algo importante y no consigo recordar que era - preguntó con cara de preocupación.

[Off Rol// Notese que es un tanto bipolar la muchacha]

La escuché y decidí seguir con bromas: - Pues sí.... la verdad. Nos juramos amor eterno y lo hicimos salvajemente encima de la mesa del bar hasta 3 veces.- La miré intentado aparentar serio y luego me reí. -Tranquila, no pasó nada más relevante que lo que te he contado.- le acabé diciendo. - Pero,... una cosa, recuerdas que pasó a partir de que te dejara en el taxi?- Le miré con el ceño fruncido mientras Ariel aún estaba entre mis brazos.

Se quedó extrañado y le dije: - realmente no lo se... no recuerdas algo del chico con el que estuviste en la casa de los gritos?, quizá algun amigo tuyo? Seth?... - Le dije mirándole a los ojos. Entonces paré y le dije: - Jo, entonces a quien le tocaste el piano? - acabé diciendo con cara de celos.

-Yo no se si lo tocaste, pero en un principio íbamos a ir a la casa de los gritos a que tocaras el piano- le dije mirándola. A su petición saqué la varita y la agité. Luego le dije: - para qué llevas vendas?, eres maga!- Le dije mirando sorprendido sus manos. - Entonces ni idea de lo que pasó?-