Disfrutando de una caminata (Margaret)

La tarde era perfecta para salir a pasear fuera de Hogwarts (algo que por lo general hacía diariamente), decidí dar una vuelta Hogsmeade, ya que desde que estaba el Hogwarts jamás me había dado la oportunidad de andar por esas calles… Todo era muy alegre y magnifico, me sentía tan feliz de ver como la gente platicaba en medio de los senderos y entraba a diversos lugares sólo para convivir.

-¡Pero que calidez tiene éste lugar! -exclamé fasinada.
-En eso tienes mucha razón, Sally -dijo mi pequeño dragón chino de color rojo, Mushu, que estaba dentro de mi bosillo.

Una extraña chica me tomó por sorpresa… viéndome con una cara de incomprensión y confusión… me quedé con los ojos abiertos como platos y la boca entreabierta. La verdad es que no entendía, como de pronto, se me acercaba alguien viéndome de esa forma, preguntándome si estaba hablando sola… a mi parecer no era nada anormal, al contrario, era muy agradable…

-¿Eh?... yo… no, no estoy hablando sola… -dije confundida cuando llegó hasta a mí-. ¿Por qué preguntas?
-¿Acaso insinúas que Sally esta demente? –Mushu brincó de mi bolsillo para treparse a mi cabeza y ver mejor el rostro de la chica que se me había acercado. Como era su costumbre… él salió a la defensiva.
-Tranquilízate, dragoncito atolondrado –dije con suavidad-. No creo que esta chica tenga malas intenciones

La verdad es que este encuentro me sacaba un poco de onda, no entendía por que aquella chica me miraba con anormalidad, me he paseando con Mushu, platicando con él, por lugares mucho más concurridos y nadie había dicho nada y muchísimo menos mirarme de tal forma, era sumamente extraño.

-¿Cómo de que especie soy? –dijo Mushu tratando de sonar ofendido.
-Es un dragón chino –dije con normalidad-. Es un poco extraño, ya que es el único dragón que he visto, que ha aprendido a dominar la lengua humana.

-Pues... la verdad no lo sé, desde que tengo memoria este animalito sabe hablar
-JAJAJAJA la verdad es que no fue fácil... si me llevó mucho tiempo

Era interesante como este encuentro se había convertido en una plática sobre la rareza de mi guaríán (segun él) dragón. Miré como su rostro se mostraba aun más interesado en Mushu... No entendía por que cada que salía de paseo, la gente se le quedaba viendo fasinada.

-Perdón, no me he presentado... Me llamo Elizabeth -le extendí la mano con una sonrisa-. Y el el Mushu...

off// lamento la tardanza xDUu

La verdad es que ñllo que decía era cierto, un encuentro así de extraordinario era bastante incomodo viendolo de cierta forma, mas para mí esa no era razón para portarme mal con ella.

-Descuida... no hay problema, también estoy encantada de conocerte
-De hecho me siento alagado -dijo mushu con mushca dignidad (talvez demasiada)
-TÚ NO TIENES REMEDIO, DRAGONCITO PARLANCHÍN

Sonreí al ver como reía ante nustras discusiones... era extraño encontrar gente que no se hartara de nuestras peleas.

-Sí, pero... disfruto más estar afuera de Hogwarts que adentro tomando clase -confesé-, detesto sentirme encerrada, es horrbile.

Aparté mi vista del rostro de Margaret y recirrí mi alrededor en una vista rápida... simplemente era muy buen lugar para conocer gente y disfrutar de un rato fuea de estres escolar.

Antes de que pudia contestar, Mushu se botó de la risa, casi cayendose de mi cabza, era un risa estruendosa e histerica... parecía que pronto explotaría por tanto ruido y esfuerzo que utilizaba el pequeñño dragón.

-Sally, es una vaga, nunca la he visto en clases... prefiere andar cam9inando por hay que tomar enserio su educación
-Eso no es cierto
-Sí, claro... entonces por que siempre le pides a Gael que te ayude con los trabajos, yaq que tu ni te dignas a pasa por las aulas
-es diferente...

sonreí... Mushu era bueno en fastidiar y no había poder alguno que llo detuviera.

-Eso me diccen cada que me ven paseando fuera de Hogwarts -reí también.
-Que es todos los días.

Fulminé a Mushu con la mirada, omé un poco de nieve y se la metí en el hosico para que se cayyra, Mushu se estremeció y no puso que hacer, por unos momentos, luego derritió la nieve cn una llama pequeña y el agua que se acumuló, me la lanzó a la cara.

-Es lo habitual, querida... es todo un deporte para mí
-Sí, claro -Saqué mi varita y la utilizé para pegarle en la naríz al pequeño dragon respondón.

La verdad era que me divertía molestar a aquella lagartija colorada, aunque a veces si era algo desesperante.

-No, lo encierro en su jaula, con comidita y agüita para que pase el rato -bromeé.
-Pero sería divertido jugarles bromas a todos mientras intentan hacer algún hechizo.

Fulminé a Mushu con la mirada pero al mimo tiempo conteniendo la risa.

-Si de por si tenemos 5 tristes puntos, con este estorbo, seguro quedamos a deber puntos

-Obviamente, queria... si puedo hablar, ¿Para que me calló?-Para dejarnos descanzar de ti un rato

Tomé a Mushu por la cola y lo metí a mi bolsa.

-Y... dime, ¿Ibas a algun lado en particular?

pensé en su respuesta y luego contesté:

-Pues, no, sólo vine pasear y a conocer, ya que, por muy aro que suene, desde que estoy en hogwarts nunca había venido a hogsmade

Reí ante lo que me había dicho. Ya había escuchado a varios de mis amigos, quejarse de no poder hacer magia en el verano, sobre todo a mis hermanos, pero si algo me enseñó Raoul antes de marcharse, era el mantener la compostura y la disiplina.

-Sí, a veces puede ser frustrante, aunque a mí no me pasa muy seguido ese problema. n algunas ocasiones envidio la vida muggle, parece ser más simple que la nuestra, rodeada de criaturas mágicas y hechizos.

-Tú no te quejas por que eres mestiza, si bien Rauol y tu madre te enseñaron a comportarte con la magia. Aunque tupadre no estuvise de acuerdo a someter a sus hijos a una vida muggle.