¿Alguien quiere mojarse? (libre n///n)

Aquí de nuevo, una vez más paseando sin sentido alguno, buscando donde relajarse y escribir con calma, nuevamente alejandose de la sala común (de loos dormitorios de las chicas o mejor dicho: "La fábrica de egos juvenil del año") y es que simplemente no encontraba a nadie de su casa, que sea chica o chico (apoarte de Gael) que pudiese llevarse bien con un ser tan poco inusual. Sólo había amigos de otras casas, la mayoría eran los valientes leones. Un suspiro sale al recordar la idea y la caminata por el suelo húmedo del lago continua sin parar en ningún momento.

Mrando el suelo nublado sobre el apacible y oscuro lago, que con sus apacibles aguas, le daban un toque gótico al ambiengte. Una brisa llena de vapor de agua fría no era de mucha ayuda en esos momentos. Obligándo a uno a cubrirse con los abrigos de otoño. Otr suspiro que se dibujaba en el aire sale del pecho y los pies se cansan de tanto caminar.

A lolejos, a lolejos de la orilla del lago, se ve un árbol seco, debido a que el frío lo quemó. Un buien lugar para descansar los pies y dejar que el agua ayudara a calmar los males del día. Demasadas tareas,m demasiadas peles por copiar los trabajos no cumplidos, visitas a la biblioteca, insesantes pláticas de profesores, anotar textos y notas de cada una de las materias, acomodar pergaminos, exámenes sorpresa, puntos ganados y oerdido, rivalidad.... son demasiadas cosas para un sólo día y eso que la lista aun no ha acabado.

Faltaban al rededor de treinta metros para llegar al árbol seco. Un suspiro, ahora de alivio se vuekve a dibujar, blnco, en el aire húmedo y gélido.

Una vez sentada en el suelo, a lo lejos se distingue alguien más que se acercaba a ese mismo lugar, al principio precía estar indignada, sólo ligeramente, pero al acercaese, saluda de manera cortes y amable. La chica que ahora ocupaba el asiento bajo el árbo,l la mira con cautela, viendo que en su ropa predomina un color verde. Toma aire tranquilamente y contesta al saludo de igual manera que la otra chica. Cierra su libro y guarda el lápiz, incrustándolo en la coleta de su cabello.

-También aburrida del castillo -pregunta amenamente-, supongo...

Voltea a ver el apasible lago oscuro, intentándo imaginar todas las criaturas que hay se escondían de los humanos y resto de criaturas mágicas terrestres.

-Éste se ve un buen lugar para liberarse de un día ajetreado.

Elizabeth miró a la Slytherin, por unos momentos, pensó que sería de aquellas que la atacarían, aunque se connsoló cuando ella siguió su conversación barata. Elizabeth disfrutaba en serio de la vista nebulosa del lago. Fria y llena de nubes espesas. Anunciando que el frío lleharía pronto. Pero antes de poder contestarle a la chica de sLYTHERIN, llega otra chica de ravanclaw. Precia amistosa, aun con el cigarrillo encendiso, haciendo que su boca humeara.

-Claro, sientate... la naturaleza no te lo impediría, entonces ¿Por que habría de hacerlo yo?

Elizabeth se sentía de buen humor, y gustaba de nuevas compañías, diferentes a las que frecuentaba últimamemente. No quería recordar su encuentro com una tal Margaret, que la despreció por ser sangre sucia, aun siendo de la misma casa.

Riò ante su comentario y frota su cabello pos unos instantes, observa a la slytehrin por unos momentos antes de contestarle a la otra chica. Esperando que no le sea un inconveniente. Piensa antes de hablar para no desplazar a la chica de verde y hacerla sentir mal con el ambiente.

-Creo que entre nosotras no nos conocemos... -rìe levemente y muestra una sonrisa de confianza.

-Elizabeth du Lune -contestó muys alegre y regalándoles una sonrisa cálida a ambas chicas.

Era un ambiente, que algunos considerarían malo por dos simples razones: El clima que era muy característico en el lago y que dos Ravenclaw psaran tiempo con una Slyatherin; para Elizabeth, las casas era sólo el lugar donde tu mente estaría mejor relacionada, pero no significaba que eso determinara quienes serían amigos suyos, enemigos e incluso amores.

Si bien ese día se había encontrado a una chica de verde de buen aprecido, otro se había encontrado a una chica de azul, igual que ella, que la despreció por complete. "Mestiza... lo siento por ti". Cómo le causaban malestar esas palabras...

Sintió el aroma a tabaco en el aire, ella miró a las chicas que compartían los cigarrillos y suspiró con una media sonrisa en los labios. El humo no le molestaba, le daba una total indiferencia, incluso en ocasiones de gustaba el olor, pero no se sentía capaz de fumar a tal grado de no parar. Tan sólo olía del tabaco quemado en silencio.

-¿Acaso no les da curiosidad que habrá debajo del lago? -pregontó para intentar hacrles conversación.

Elizabeth pensó la idea por unos instantes... "Nadar, no es lo mio", se decía, "Pero muero de curiosidad de entrar al lago a investigar...". Se levantó yvse acercó a la orilla del lago, dejando su cuadernillo al pie del árbol, junto con su lápiz. Estaba emocionada y con una sonrisa en los labios, se quitó los zapatos y metió los pies en el agua. Rió para ella misma y volteó a ver a las dos chicas que le acompañaban. UIntentó buscr esa curiosidad hacia el lago, al igual que ella lo tenía, buscaba miedo y valentía tambien. Si que era chiocas muy amigables.

-Tienes razón, meter sólo los pies es aburrido. Yo acepto la propuesta.

Elizabeth hiso salpicar el agua con sus talone mientras esperaba la reacción de las otras dos chicas. "Si me pasa algo abajo del agua, tehare personalmente responsable, Raoul"; aun recordaba esa vez que su hermano mayor casi la ahogaba en un río al intentar ponerle un juego de competencía entre hermanos.

Elizabeth observó cómo las chucas parecían estan un poco arrepentidas de la idea, a lo que tan sólo ella sonrío y se letantó, caminó hacia el lago, dejándo que el agua le llegara hasta las rodillas. A ella no me importaba mojarse y no le temía a los resfriados, tan sólo tomaría algún medicamento en la enfermería y el problema estaría resuelto.

-Pues a mi no me importa mojarme la ropa... No sé ustedes, pero enserio quiero entrara a ver que hay en el lago -dijo intentando animar a las dos chicas.

off//lo siento X.x bloqueo mental

Norah miro fijamente a Elizabeth, se encogio de hombros y se saco la tunica que llevaba y la dejo al suelo, al lado de los zapatos, tambien se quito los calcetines y la corbata. Se miro su ropa algo apenada.

- Ok, al agua- dijo Norah hiendo hasta el lado de Elizabeth y agarrandola del brazo para ir directas hacia el lago- ¿vienes o no, Miller?- pregunto de golpe girandose en direccion a la otra Ravenclaw quien no habia abierto la boca.

Elizabeth esbosó una gran sonrisa al ver que las chicas se animaron al entrar al lago, se quitó la túnica y la aventó lejos, mirando que callera en un lugar en donde no se mojara. La necesitaría seca cuando saleran del lago. Sintió pánico conforme avanzaba hacia el lago, el agua ya le llegaba a la cintura cuando miró el agua un poco angustiada, forzó una sonrisa y dirigó su mirada a las chicas.

-Todas sabemos nadar ¿No? -dijo confiada de que fuese una respuesta positiva.

Nadar no era el mejor don de Elizabeth, pero sabía hacerlo (un poco), pero sus ganas de averiguar los secretos del lago la llamaban y eran más fuertes que su miedo a ahogarse. Tomó aire y se llenó de valor y sonrió y siguió avanzando hasta que el lago casi le cubría el pecho.

-Ven, Maud, quedate con nosotras -dijo, extendiémdo su mano para que la sujetara.

Norah camino con valentia por la orilla, sentia que el agua mas o menos tibia hacia que la ropa se le pegara al cuerpo, odiaba esa sensacion, parecia que alguien la estubiera agarrando. Suspiro algo molesta.

- Muy bien chicas, ya estamos lejos de la orilla ahora deberiamos meter la cabeza dentro del agua, si no dificilmente veremos algo- dijo Norah mirando a las dos chicas.

-Tienes razón... si no si pescaremos un resfriado... bueno, yo primero -dijo sumergiendose de golpe.

Se quedó en el fondo unos minutos y salió del agua con toda la cara empapada, llevó mi cabello para atrás, jalándp aire para llenar sus pulmones una vez más.

Chàpoteó en el agua con las piernas, salpicando a la chica de verde y a la de azul. Trataba de hacer que ellas también chpotearan en el agua antes de dumergirse más abajo de la superficie. "esto llegará a ser interesante", se decía cuando veía al fondo oscuro del lago.

-Vamos, metanse -dijo riendo.

Norah al ver que la Ravenclaw le volvia a tirar agua se metio de lleno en el lago. Abrio los ojos y quedo maravillada.
Mas alla de ellas habia una bajada que llevaba a una extraña area llena de plantas altisimas que se movian al compas de la corriente. Volvio a salir al exterior con el pelo rubio totalmente mojado, se froto un poco los ojos y escupio un poco de agua que habia tragado.

- ¡Fascinante!- exclamo con una sonrisa- es genial, debemos ir mas al fondo.

Noto que de golpe un poco de viento las azoto haciendo que empezara a temblar de mala manera, estornudo un par de veces seguidas.

- Resfriado a la esquina- murmuro mas para si misma que para las otras dos.