Cita con Jack

El día anterior habíamos quedado que nos encontraríamos en las Tres Escobas, por lo que allí me dirigí luego de arreglarme para dicha salida.

Me había puesto unos jeans de color negro que a mí me fascinaban, y una blusa amarilla con escote en v. Unas botas hasta media pierna eran las que cerraban el conjunto.

Ingresé al local, y me alegré al notar que no estaba atestado de gente. Busqué con la mirada una mesa libre, y cuando la distinguí, cercana a una ventana, allí me dirigí, para esperar a Jack. Mientras tanto, observaba la lista de bebidas que anunciaba un cartel en la mesa.

me arrlegle lo mas que pude me puse unos jeans grises, una camisa de cuello azul y mis zapatos negros, justo lo necesario para la ocacion, llegue al local y ahi estaba sentada en una mesa se veia demaciado hermosa, camine hasta ella dando un beso en su mejilla despues de eso me sente - perdon por llegar un poco tarde me perdi en las escaleras de la escuela - sonrei - como has estado?

Me sobresalté cuando me besó la mejilla, puesto que no lo había visto llegar, pero luego me recompuse y sonreí.

- Ah, esas escaleras suelen ser muy engañosas, sobre todo si vas con apuro. - comenté, riendo.

- Muy bien. - le respondí con una sonrisa. - ¿Y tú?

Lo observé. Se veía muy guapo con aquella camisa, y en general su arreglo lo hacía ver muy bien.

si demaciado engañosas diria yo - dije con una sonrisa - igual muy bien ya que me encuentro contigo - sonrei - te ves muy linda - dije mirandola fijamente, en ese momento se acerco uno de los empleado para preguntar que hibamos a querer - yo quiero un hidromiel - le dije al mesero - tu que vas a querer?

Reí, de acuerdo con lo de las escaleras.

- Me alegro que estés bien. - respondí sinceramente. - Muchas gracias. También tú te ves muy bien. - dije, algo ruborizada. Ya comenzaba a acostumbrarme a sus elogios.

Entonces, llegó uno de los empleados, y nos preguntó que íbamos a tomar. Jack pidió un hidromiel, y luego me preguntó qué quería yo.

- ¿Yo? Eh... - eché un vistazo al cartelito que anunciaba lo que había. - Tomaré una cerveza de mantequilla. - resolví, sonriendo.

tome su mano y la bese con delicadeza - enserio te ves muy bella - dije sonriendo - como has estado? - pregunte mirandola a los ojos y perdiendome en ellos

Me ruboricé intensamente ante su gesto, y bajé la mirada durante unos momentos.

- Gracias, ya lo habías dicho. - repondí a su halago, apenas levantando los ojos, pero lo suficiente como para que él me hipnotizara con su mirada.

- Pues, bien... Aunque la verdad es que casi no pude dormir. - le confesé.

sonrei - pues creo qeu me gusta decirlo - la mire fijemente a los ojos con ternura y escuchando lo qeu me decia sin soltar su mano - vaya y por que motivo no has podido dormir linda? - pregunte acariciando su mejilla

Estaba empezando a pensar que el tono de mi piel no volvería a su tono normal mientras estuviera con él. Era muy tierno y sus gestos me hacían sonrojar.

- Bueno... Pues... - admitir aquello me resultaba bastante vergonzoso. - Porque estaba pensando en hoy... en cómo sería. - dije por fin.

sonrei y me sonroje un poco - asi que pensabas en hoy vaya - tome sus dos manos y las acaricie dulcemente - y como pensaste que hiba a ser? - pregunte curioso por saber en lqo eu eella pensaba - tal vez y podemos hacer realidad tus pensamientos

Solté una risita al cruzarme un pensamiento que nada tenía que ver con lo que estábamos hablando. Parecíamos dos tomates sentados en el medio de un bar. Me recompuse rápidamente, alejando aquella idea de mi mente.

- Pues... la verdad es que no lo sé. - le dije con sinceridad. - Pensé varias cosas, aunque ninguna era muy realista que digamos. - torcí el gesto en una mueca divertida. - En realidad, parecían sacadas de una serie de televisión.

sonrei por lo que decia - vamos linda cuentame - tome su barbilla con mi mano y me acerque para besarla con gran pasion, como nunca antes habi besado a alguien - quiero saber que era lo que pensabas - dije con una sonrisa en el rostro y un poco sonrojado

- De verdad... No tiene importancia... - intenté convencerlo. Aunque me daba la sensación de que no se daría porvencido. - Yo no... Oh, ¡está bien! - exclamé, rindiéndome ante su mirada.

- No sé si alguna vez has visto televisión, porque es un aparato muggle, pero bueno... En algunas de estas series que digo, pues, los protagonistas después de cansarse del lugar en donde se citaron terminan yendo a otro lado, como una especie de paseo. Pero no cualquier paseo, por ejemplo en carruaje, o en bote... - ya no pude hablar más, me sentía demasiado estúpida diciendo eso. Bajé la mirada y la mantuve fija en la mesa, esperando su respuesta y a la vez deseando que olvidara el tema.

sonrei escuchando lo qeu me decia, levante su rostro y la bese dulcemente - nunca he visto un televiso pero, me gustaria hacer lo qeu me dice suena emocionante ademas nunca he andado con una chica por un carruaje - me levante y ofreci mi mano para dar ese paseo - a donde te gustaria ir preciosa - dij econ una sonrisa e intentando que no se sintiera ridicula por loq eu me habi adicho

Me besó, momento que aproveché para cerrar los ojos, intentando convencerme de que no había dicho lo que había dicho.

Pero él no se burló de aquello, en cambio, tomó la idea como una verdadera posibilidad.

- Pues... yo... - estaba sorprendida y a la vez agradecida de que lo tomara de esa forma. Su sonrisa me hizo sentir bastante mejor. - No lo sé. ¿A dónde irías tú?

sonrei - iria a donde tu vayas - sonrei abrazandola - iria donde tu amor me lleve, donde tu me digas , por el camino qeu tu me marques - sonrei y ofreci mi mano para salir - claro a menos que gustes hacer otra cosa y no dar un paseo - dij eviendo sus ojos

Sonreí, emocionada ante sus palabras.

- ¿Y desde cuándo eres poeta, si se puede saber? - pregunté en tono bromista. Tomé la mano que me ofrecía, levantándome de la silla en la que estaba sentada.

- Y bueno, un paseo estaría bien. - dije. - Aunque nada de carruajes - pedí con falsa seriedad. - Que eso se quede en las películas. Caminar por el pueblo es suficiente.

sonrei - pues no lo se salio por pura coincidencia - dije con una sonrisa abierta - ok nada de carruajes unicamente una caminata - sonrei y camine junto con ella a la salida - tu me guiaras por donde ir recuerda qeu yo te seguire - dije con una sonrisa y dando un beso en su mejilla

- Pues tus coincidencias son muy poéticas. - dije divertida.

Comenzamos a caminar hacia la salida, y ya estaba pensando hacia donde ir cuando un recuerdo asaltó mi mente.

- ¡Un momento! - exclamé, deteniéndome bruscamente. - Tenemos que pagar las bebidas que pedimos. - avisé.

Aunque no nos la habían llevado todavía, las habíamos pedido, así que lo correcto sería pagarlas.

sonrei - pues creo qeu si son muy poeticas - escuche loq eu me dicia asaque dinero de mi bolsa, lo coloque en la mesa y sonrei - esta bien vayamonos - tome su mano nuevamente y di un beso en sus labios - adonde iremos ya pensaste? - pregunte mirando sus ojos

Sacó unos Galeones de su bolsa y los dejó sobre la mesa en la que habíamos estado sentados.

- No lo sé. - contesté. - La verdad es que no tengo ganas de ir a un lugar en particular. - Busqué en el bolsillo del jean unas cuantas monedas, dispuesta a pagar mi parte. - ¿Qué tal si vagamos por las calles? - pregunté, divertida.

Encontré lo que buscaba y lo dejé sobre la mesa, mientras esperaba la respuesta de Jack.

sonrei po rlo que hacia, tome su mano - pues esta bien caminemos por las calles preciosa - mire sus ojos y sonrei varias veces - te ves muy linda aunqeu creo qeu ya lo dije muchas veces no me importa me gusta decirlo - dije sonriendo caminamo sjuntos unas cuantas calles, acaricie su mano - me siento feliz de que estes conmigo

Salimos afuera, él no parecía cansarse de sonreír.

- Muchas gracias - respondí. - Sí, creo que sí, pero me gusta escucharlo. - amplié aún más la sonrisa que estaba en mi rostro. - Y más viniendo de ti.

Caminamos en silencio durante un rato, hasta que fue roto por sus palabras dulces.

- Estoy feliz porque me lo hayas pedido. - respondí. - A decir verdad, siempre me gustaste. - le confesé, sonrojándome un poco. - Pero no creí que quisieras nada conmigo.

- pues continuare diciendotelo preciosa - sonrei, escuchando su confesion - yo tambien estoy feliz de que hayas aceptado - escuche atento - tu tambien me gustaste mucho - tome su rostro y lo bese con dulzura - yo crei que tu no hibas a querer nada conmigo - la mire a los ojos - ya veo que los dos estabamos muy equivocados

- Muy equivocados. - concordé, acercándome a su rostro, hasta que apenas nos separaban un par de centímetros. - Por eso me alegro de que me lo pidieras, porque si tú no dabas el primer paso... Pues, yo seguramente no lo habría hecho, y entonces no estaríamos juntos ahora. - dije.