Regresamos al castillo (Chloe)

Después de pasar un día en Londrés regresamos por fin al castillo. Ya estaba de noche. No estaba seguro de que superamos o no la hora límite de estar ya en el castillo, pero no me importaba. Este es el día más hermoso de mi vida.

Llegamos al castillo de la mano. Le abrí las grandes puertas, primero miré para ver si no había nadie allí. Y, en definitivo, no había ni Filch, ni la gata Norris, ni nadie. Abrí las grandes puertas y la dejé entrar primero como el caballero que soy. -¡Pasa, princesa! Le dije. -¡No hay nadie! Añadí. Desde ahora en adelante así le voy a decir porqué yo soy su caballero que le cumple en todo lo que ella ordene y ella mi princesa consentida.

Llegaron al castillo cuando ya era de noche. Fede le abrió las puertas y Chloe entró dándose importancia, como si estuviera en un pase de modelos. Esperó a que Fede pasara.

-Y aunque hubiera alguien, todavía no es la hora límite para estar en las habitaciones, así que técnicamente, no nos pueden decir nada- comentó riendo. Fede llegó hasta ella y Chloe comenzó a saltar por la entrada en dirección a su casa.

Me quedé viendo su manera de entrar. Parecía modelo en pasarela. Estaba decidida y segura de sí misma.

-¡Tienes razón! Afirmé lo que acaba de decir después de haber mirado el gran reloj que había en la entrada, además de los relojes de las casas que ahora mostraban 10 puntos para Gryffindor. Mi cara cambió enseguida. ¿En qué momento pasó esto? Aldo debe saberlo de inmediato.

Mientras estaba mirando los relojes de las casas, Chloe dió saltitos para ir a su habitación. Llegué hasta ella. -¿Adónde vas? Le pregunté.

Fede la alcanzó después de dar un par de pasos y le preguntó a donde iba.

-Pues a mi habitación, estoy muy cansada y me apetece dormir un poco.

Quiería irse a dormir. No la podía dejar sola, era mi deber cuidarla, así que decidí acompañarla hasta su habitación para asegurarme de que llega con bien.

-¡Te acompaño! Le dije sonriente. La verdad es que no podía dejar sola a mi princesa. Soy el encargado de protegerla, de velar por su futuro hasta que me muera o me maten.

Chloe rio mientras negaba con la cabeza. No era necesario que la protegiese siempre, ella era perfectamente capaz de cuidar de ella misma.

-No te preocupes Fede, se llegar muy bien a mi casa, hace años que no me pierdo- aseguró riendo- además, así es menos probable que nos pillen.

Sabía llegar a su casa sola. Entonces mi misión por el día de hoy terminó. -¡Tienes razón! Le sonreí. -En este caso si no tienen porqué pillarnos.

Hize una reverencia con mi mano, mientras la otra mano la tenía en mi espalda. -Entonces, si no necesitas más de mí, éste humilde sirviente se retira! Me agaché un poco, luego retomé mi posición normal. -Creo que yo también iré a mi cuarto a descansar. La noche ya se había apoderado del castillo.

Hize otra corta reverencia. -¡Hasta mañana, mi princesa! Retomé mi posición normal, me acerqué para darle un beso en la mejilla y me separé para irnos cada uno a sus dormitorios.


{ regreso en unas horas ^^ }

Fede se fue a su cuarto a descansar también. Chloe se fue dando saltos a su casa.

Hize una pequeña reverencia xD y me fui para la sala común de mi casa que estaba por las mazmorras. Chloe se fue felíz, dando saltitos para el torre de su casa. Todavia nadie nos había visto... ni siquiera Filch y la gata Norris. Cuantos quisieran agarrar y darle una buena patada voladora a la gata Norris xD.