A flor de piel (Gael)

Escuché el tono de voz de Elizabeth, sarcástico, pero había algo escondido es sus palabras que no lograba descifrar, posiblemente después me lo diría pero aún así me llamaba la atención sus palabras, miraba la ventana como hacía un rato dando pequeñas y discretas miradas al rostro de Elizabeth sus expresiones eran tan peculiares en ella, antes de que pudiera decirme nada un rayo iluminó la ventana que atraía mi mirada, haciendo pequeños dibujos en el cielo y al momento en el que el sonido llegó a mis oído las ventanas también vibraron, di un pequeño salto en mi asiento eso me pasa con los sonidos fuertes siempre hago lo mismo saltar… Pero unos ruidos en donde estaban las habitaciones de chicos hicieron que mi cara se volviera a un gesto lleno de asco, no me quería ni imaginar que es lo que estaba pasando en la habitación, simplemente esperaba que mi cama no la tocaran, sería tan asqueroso llegar a dormir allí después de que alguien… No quise seguir pensando en eso, después Elizabeth se rio un poco de mi cara seguramente se imaginaba que es lo que estaría pensando en esos momentos, pero segundos después continuó hablando… Las palabras que salieron de su boca me dejaron perplejo, completamente desorientado y confundido, lo que se reflejó en mi rostro con unos ojos abiertos más de lo que usualmente están. ¿Cómo es posible que me tenga envidia? Me preguntaba a mí mismo, tratando de darme una respuesta que no aparecía, para empezar era un chico que se había quedado sin madre, su abuela era un vieja loca que le gustaba matar, torturar y violar entre otras cosas, y también me quería muerto, además de que estaba metido en medio de una guerra que de primer momento no me concernía, sin mencionar que en la cuestión amorosa todo eran problemas, el chico al que había amado por primera vez lo había perdido en Francia, mi segundo gran amor había desaparecido sin darme explicaciones y los otros dos chicos que quedaban se podría decir que no eran exactamente lo que había buscado y simplemente estaba súper confundido con ese tema… Sinceramente no sabía que es lo que le daba envidia.

Yo… – se notaba que no sabía que decir, simplemente era algo que no me salía y mi cerebro estaba trabajando demasiado rápido como formular una frase – bien ya hiciste tu broma, ya me asustaste, ahora es cuando nos reímos – dije tratando de que funcionara aunque no lo esperaba, era lo único capaz de decir esperando que de verdad fuera una broma – ¿Qué es lo que envidias?

Gael creyó que bromeaba, por todo lo que saltaba en mi mente, creí que enserio lo había dicho en forma de burla y broma, pero por otra parte si le tenía envidia, por que por lo menos él aun tenía a su padre, talves no sabía su paradero pero por lo menos estaba vivo y tenía a Loan, aunque tampoco supiese mucho de él después de entrar a Hogwarts, pero sabía que él estaba en alguna parte esperandolo. Pero ya habíamos hablado de demasiadas cosas tristes y lo menos que necesitaba era hacernos sentir mal nuevamente, la noche de por si se estaba haciendo demasiado larga cómo para que ahora llenarla de malos recuerdos y llanto.

-No, nada, sólo juego, Gael... -callé en un instante, dejándo aparecer un bostezo-. Dios, no quiero subir a mi habitación, tengo miedo de lo que pudiese encontrar.