El único lugar que no apesta aquí

Primeros días de colegio y ya estaba hasta las narices de estar allí encerrada. Papá me había enviado ya como doce ramos de liliums blancos de su parte y de Altair con tarjetas donde decían lo mucho que me echaban de menos. Era agradable... aunque eso de que llegasen en medio del desayuno me desconcertaba un poco...

Allí estaba, con mi impoluto uniforme de Hogwarts, a la entrada de la Biblioteca. Abrí la puerta y aspirré prfundamente el aroma que los libros desprendían. Aquel lugar sí que era mágico para mí. Por una de las ventanas pude ver que llovía. Me entraron ganas de salir corriendo a mojarme en el jardín pero, no, había ido por algo en concreto. Hacía ya un año que ayudada a una chica de Slytherin con sus deberes porque no se le daba muy bien y había quedado con ella en la biblioteca para ver cómo le había ido con los ejercicios extra que tuvo en verano. Así, antes de presentarlos, yo podría ayudarla a pulirlos para conseguir mejor nota.

No tenía aún muy claro cómo me caía aquella muchacha... pero sabía que necesitaba ayuda y no me importaba ofrecerle la mía. Miré el reloj. Había llegado pronto, por lo que me puse a mirar por las estanterías, buscando algo que pudiese motivarme. Encontré un libro de partituras para violín y otro de whistle. Hacía años que no tocaba el whistle, igual le pedía a papá que me lo enviase en mi próxima carta. La música irlandesa siempre me alegraba el día.

En la sección de Pociones vi tres libros nuevos que llamaron mi atención. La señora Price no tuvo inconveniente en que me los llevara, pues sabía que los devolvería casi en un mejor estado que en el que me los llevaba. Al contrario que a mucha gente, esa señora me resultaba simpática y le tenía aprecio, quizá por ser la guardiana del único tesoro auténtico de aquel castillo: sus libros.

Me sneté en una de las sillas de las mesas cercanas a una ventana y esperé allí a Pansy, esperando que fuera puntual. Abrí uno de los libros de Pociones y pronto saqué un pergamino, mi tintero y pluma y me puse a tomar apuntes.