Molestando al árbol (Audrey)

Chloe se encontraba sentada en una piedra, a una prudente distancia del Sauce Boxeador. En su enorme aburrimiento, se le había ocurrido la brillante idea de ir a ver cómo se movía el Sauce, se dedicaba a mover piedras de un tamaño considerable, mediante el hechizo Wingardium Leviosa y veía cómo el Sauce se defendía de ellas, era de lo más divertido y nada peligroso, a menos que alguien idiota pasase demasiado cerca, lo cual dudaba seriamente.

Estaba harta de dar vueltas por Hogwarts, me lo había recorrido un par de veces, y ya creo que hasta los cuadros estaban hartos de verme por ahí, por lo que decidí salir e ir a dar una vuelta por los exteriores del castillo, haber si era más emocionante. Había oído a un par de chicos hablar del sauce, por lo que me decidí acercar. Creo que nunca había ido a verlo. Cuando estaba a unos metros, vi a una a lo lejos, que intentaba hacer algo que no logré adivinar, por lo que decidí acercarme...

Chloe se giró levemente para observar el paisaje y de reojo vio como se acercaba una chica, por lo que paró rápidamente con su actividad, no quería que el árbol le diese a la chica. Como hablar con personas le parecía más interesante que molestar a un ser vegetal (por muy violento y peleón que fuera), se dirigió hacia la chica.

-Hola, ¿qué te trae por estos hermosos lugares?- le preguntó con una sonrisa.

Vi como la chica se acercaba a mi, sonreí dispuesta a entablar una conversación por fin con alguien que no fueran cuadros.
—Hola—Pensé antes de responder—Pues, el no tener ganas de seguir recorriendo el castillo.—Medité unos segundos y añadí—Por muy grande que sea, creo que ya me lo recorrí varias veces. ¿Y tú que hacias? Parecía divertido

Chloe sonrió tras la explicación de la chica, quien estaba en lo cierto. Por muy grande que fuese el castillo, no era lo suficientemente grande para que alguien aburrrido sin nada que hacer vagase eternamente, y esto provocaba que la gente saliese a vagar fuera, dónde había más espacio, pero hacía más frío.

-Molestaba al Sauce Boxeador, por decirlo de alguna manera, ya que no creo que el sauce tenga sentimientos, y si no los tiene no puede sentir molestia, luego si no puede sentir molestia yo no puedo molestarlo. Para ser más exactos, digamos simplemente que me divierto a su costa, pero es más divertido hablar con alguien, por lo general- explicó con una sonrisa.

Me costó un pelín seguirla, aunque cuando terminó no pude evitar soltar.
—¿Eres Ravenclaw cierto?—Aunque en mi interior hacia mi propia reflexión. El sauce era un árbol, los árboles eran seres vivos, y los seres vivos tenian sentimientos, ¿no? ¡Ahora estaba emparanollada! Decidí dejar de pensar en eso, quizas en una noche en vela, lo retomara...

Chloe sonrió. Era la primera vez que le preguntaban su casa y acertaban. Por lo general solían pensar que era Slytherin, pero si consideraba que las personas que se lo preguntaban solían ser los que caían en alguna de sus bromas o alguien a quien hubiese molestado previamente de otra manera, no era de extrañar que pensasen eso.

-Pues sí, soy Ravenclaw. Eres la primera que lo adivina y por ello te doy puntos extras, ahora me caes mejor que medio minuto antes, felicidades- le dijo sonriendo.

-¿Y tú a qué casa vas?- le preguntó interesada.

Sonreí al oirla que había acertado.
—Oh, gracias por los puntos extras.—Reí.— Sé reconocer a mis compañeros de casa—Aseguré riendo. Mirá que bien. Mi primera amiga, y era de Ravenclaw. Si es que tenía una suerte. Ahora mi pregunta era, ¿a qué curso iria? Intenté averiguarlo por su aspecto. Cuarto, quinto... quizás sexto. Más no le echaba. Con más suerte, seríamos compañeras de curso, a parte de casa.

Chloe enarcó las cejas divertida, eso cambiaba las cosas y le quitaba ilusión al asunto, pero no dejaba de admirar a la chica, ¡era capaz de fijarse en las personas que la rodeaban!, para la rubia eso era imposible, y no entendía cómo las demás presonas lo lograba.

-Bueno, eso te quita puntos, porque así es más fácil, pero no te los quita por completo, porque en mi opinión has realizado la difícil tarea de fijarte en alguien más, eso es muy complicado.

No pude volver a evitar reir. ¿Me caía tan bien por ser Ravenclaw? Quién sabe, debería de conocer a otras personas...
—Bueno, no fue tan dificil, con un comentario tan rebuscado, Ravenclaw tenías que ser.—Le aseguré, afirmando con la cabeza para darle enfasis.—Ahora estoy en la complicada tarea de averiguar tu edad—Le expliqué, sin dejar de pensar. ¿Parecía ser más joven, no lo parecía...?

Chloe rio, no creía que adivinar su edad fuese demasiado difícil, a simple vista estaba claro que pertececía al rango de 15-17 años, no más y no menos, ¿parecería menor para la gente que no la conocía?, se preguntó interesada. Eso estaba bien, cuando fuese mayor quizás parecería más joven de lo que era.

-No puede ser tan difícil, lo intentaré contigo- dijo la chica fijando su vista en la otra chica, pero no consiguió decidirse por ninguna edad en concreto, aunque llegó a la conclusión de que estaba en el mismo rango de edad que ella- pues sí que es complicado, no pensaba que fuese para tanto. ¡Ya está!, creo que tienes la misma edad que yo, así que si tú aciertas, yo acierto. De tí depende el destino del universo- añdió riéndo.

Volví a quedarme pensndo. Sí, en mis posibilidades estaba la de que tubiera mi misma edad, y ya que ella había tenido la misma idea, decidí que quizas era la más correcta.
—Bien, pues el destino del universo cae sobre mi propia edad. Tienes dieciseis años—Dije señalandola y esperando no haberme equivocado y haberle echado más edad o menos.

Chloe aplaudió contenta, Audrey había adivinado su edad, le parecía increíble, ya que ella misma había sido incapaz de descubrir cuantos años tenía Audrey.

-¡Bien!, lo has conseguido, tengo 16 hermosas primaveras, supongo que tienes la misma edad, si la tienes, entonces yo también he acertado y el universo está a salvo, ¡felicidad para todos!- dijo alegremente.

Me quede sorprendida. Había sido capaz de adivinar aquellas dos cosas, y a la primera. Bendita buena suerte que me esta dando Hogwarts. Riendo, le dije a la chica, que ahora que caía, no sabía su nombre todavía, sabia su casa y edad, pero no como se llamaba.
—Mira que bien, aparte de compañeras de casa, vamos a ser compañeras de curso.—Y añadí—Por cierto. Me llamo Audrey Kollers. Creo que todavía no lo había dicho.

Chloe sonrió feliz, así que iba a ir al mismo curso y a la misma casa que aquella chica que se acababa de presentar, ¡genial!, le hacía mucha ilusión encontrarse con alguien de su casa que no fuese un aburrido, o en este caso, aburrida.

-Yo soy Chloe, ¡qué bien!, además compartiremos cuarto, que felicidad- añadió felizmente.

No pude evitar volver a reir ante la felicidad de la chica, que por fin me entero de su nombre.
—Genial, ¿podremos pasarnos parte de la noche charlando?—Pregunte riendo, eso era típico en ese tipo de ocasiones. Las chicas, quedandose hasta tarde, riendo y charlando sobre diversos temas. Aunque ahora que lo pensaba, en el cuarto habría más chicas...

Chloe sonrió mientras aplaudía contenta, sería como una fiesta de pijamas, charlar hasta tarde, seguro que tener a alguien de confianza con quien hablar por las noches era algo super, iba a ser una gran experiencia.

-Podremos siempre y cuando las demás no dejen, a lo largo de mi vida en Hogwarts he aprendido que las chicas se ponen muy violentas si no las dejas dormir, así que yo te recomendaría que te cuides mucho en ese sentido- le previno.

Chloe tenía razón. Cuando estaba en Beauxbatons me puse una noche ha hablar con una compañera por que estabamos muy nerviosa por un examen que ibamos a tener, y al día siguiente todas nos miraron muy mal durante todo el día. Y yo personalmente...
—Cierto. Habrá que tener mucho cuidado con ellas. No me quiero convertir en el punto de mira de las Ravenclaws, recien llegada como estoy—Aseguré afirmando con la cabeza.

Chloe le quitó importancia a lo que dijo Audrey, las de su casa no eran precísamente peligrosas o difíciles de evitar. Era una de las cosas buenas de estar en la casa azul.

-No te preocupes, aunque te convirtieses en su punto de mira, tampoco tendrías que temer demasiado, las Ravenclaw no son demasiado dadas a venganzas y bromas pesadas, es una de las cosas buenas de la casa. Supongo que si las molestas, lo único que haran será pedirte educadamente que te calles, aunque quizás alguna se pasa un poco en el tono....

Ah, bueno, entonces estaba bien. Volví a preguntarme, por qué me habían seleccionado para esta casa, a parte de por mis buenas calificaciones, todo había que decirlo.
—Y bueno, a parte de molestar a este árbol, ¿cómo os divertis por aquí? Tengo curiosidad por saber que haceis—Le confesé. Quizás esto me ayudase a encontrar un hobbie, o algo

Chloe se lo pensó detenidamente, ¿cómo se divertían ahí?, ella tenía claro cómo se divertía, pero no podía hablar por los demás, ya que francamente no tenía ni idea, necesitaría una seguna opinión.

-Pues no sabría decirte. Yo hago muchas cosas, vuelo, leo, hago bromas, salgo con amigos cuando podemos ir a Hogsmade, eso esencialmente, pero no sé qué hacen los demás, lo siento, quizás sería conveniente que se lo preguntases a otra persona considerada más normal- sugirió.

Pensó las ideas uno por una, ella solía hacer lo mismo, salvo lo de volar, tenía mucho vertigo... En cuanto a lo que dijo de una persona normal, le respondí con una sonrisa.
—Oh, bueno, yo tampoco es que sea una chica muy normal la verdad. Quizás por eso me llamo la atención lo que estabas haciendo—Confesó.

Chloe sonrió, era agradable encontrarse con alguien que también estuviese considerada como "rara". Ella no entendía porque estaba dentro de esa categoría, y no estaba de acuerdo, por eso, le molestaba mucho que la consideraran extraña.

-Yo creo que le llamaría la atención a muchas personas pero que pocas se atreverían a acercarse, el Sauce Boxeador pega fuerte y es muy violento, por algo se le llama boxeador.

Vovlí a pensar unos momentos, para entonces decir.
—Con que el Sauce Boxeador... Bonito nombre. ¿Y ahí más árboles o objetos tan peculiares como este?—Le pregunté, quería conocer todo lo que pudiera en el menos tiempo sobre Hogwarts, para que así nada me pillara por sorpresa y no aparentar la chica novata que era...

Chloe pensó detenidamente su respuesta, Hogwarts estaba llena de sorpresas y cosas raras, pero la mayoría eran desconocidas para los alumnos.

-Pues creo que no hay más árboles como este, eso sí, no te metas bajo ningún concepto en el Bosque Prohibido, está lleno de hombres lobos, centauros irritados y arañas gigantes. Lo único bonito ahí son los unicornios, aunque nunca he visto uno. Y dentro del castillo... pues está la sala de los Menesteres, yo la encontré el otro día con un compañero, ¡es alucinante!, pero la mayoría de las personas no saben dónde está- explicó.