Paseando hacia el ocaso [LIBRE]

Llevaba todo el día en Hogsmeade y sólo para ver el ocaso, pues allí había un cielo precioso. Entré en las tiendas y compré algunas cosas que me hacían falta como ropa nueva para la escuela y otras que no me hacían tanta falta, como chucherías.

Seguía paseando hasta un lugar despejado y me senté. Ya faltaba poco para el ocaso.

Esperé a que anocheciera del todo para salir a cazar como de costumbre. Esta vez elegí a un hombre que parecía caminar despistado por Hogsmeade.
Lo llevé a un sitio apartado y lo torturé como de costumbre, deleitándome cuando me dijo que no lo matara porque tenía hijos, esposa y bla bla bla… Tonterías.
Acabé con él sin inmutarme y dejé los restos de su cuerpo en un contenedor de basura.

Reí al pensar en la cara que pondría quien los encontrara mientras caminaba por una zona poco transitada, aunque ocupada por una chica.

(O.O Sólo eso... xD)

Qué espectáculo más bonito...-pensé. Tenía que volver ya o mamá se pondría nerviosa, además no llevaba zapatos y podía enfermarme.

Suspiré y me levanté.

Por Merlín, qué frío está el suelo cuando el sol desaparece.

Empecé a caminar con las manos en la nuca. Nunca había estado por allí de noche y era una vista bonita.

(¿A qué te refieres con "sólo eso"? xD)

Como iba entretenido pensando si matar a otra persona o no, me choqué con la chica que caminaba por allí.
Gruñí y la miré con odio.

- Mira por dónde vas.

Y pasé de largo, no me interesaba.

(pues que sólo digo esto: O.O. La carita esa xD Aunque me impresionó más tu primer post en la Casa de los Gritos)

Un chico se chocó conmigo y al parecer había tenido yo la culpa. Entonces debía disculparme.

-Discúlpame.-dije haciendo una reverencia como los japoneses con educación y me di la vuelta para seguir caminando hacia casa.

(Era por no volver a poner algo parecido xD
¿Y el primer post solamente? ¿Tú has leído cómo estoy dejando a Alexandra? xD
Ya ves lo que te espera )


Bueno, quizás... si me interesaba.
Una caza más para completar la noche no estaría mal, quizás incluso y me esforzara más con esta que con la primera.

- No tan rápido - le dije, colocándome en su trayectoria en apenas un segundo, sonriendo siniestramente.

(Sí, sí que lo he visto, y eso me está haciendo reír, pero como una loca. Porque cuando veo cosas así me río de... digamos miedo. Bueno, ya veremos qué pasa xD)

Retrocedí un paso por puro acto reflejo. Qué susto.

Este chico es muy extraño.-pensé.

-¿Sí?-dije con calma.-¿Ocurre algo?

Amplié mi sonrisa. Qué inocente, cualquier persona con un poco de sentido común ya habría tratado de escapar de mí.

- Más o menos... - respondí - Sólo me quedé con hambre.

Hice una mueca, pensativa.

-Pues puedes ir a Las Tres Escobas, aunque creo que sólo sirven bebidas. Te ayudaría a buscar un lugar donde comer pero debo irme, es algo tarde.-dije y pasé por su lado para volver a casa.

(ains, me siento boba xD)

Volví a interponerme en su camino al ver que trataba de irse, ampliando la sonrisa.

- ¿Tú crees que es tarde? Pero si la noche sólo acaba de empezar... - comenté siniestramente.

-Lo sé, lo acabo de ver.-sonreí.-Y ha sido muy bonito. Pero debo irme, vivo lejos de aquí y tengo que ir caminando.

Robin, cariño, recuerda: No hables con extraños, y si ves a algún hombre extraño, corre.-resonó la voz de mi madre en mi cabeza.

Pero correr así era de mala educación... Era mejor obedecer a mamá.

Lo volví a esquivar y eché a correr.

Por fin corría, pero no le iba a servir de nada.
Rápidamente la cogí de un brazo en un férreo agarre y la frené.

- ¿No te dije que me había quedado con hambre? - pregunté, mientras meditaba cual sería la mejor manera de empezar a torturarla.

Lo miré, un poco confusa. Me habría gustado mucho ayudarlo pero no podía en esos momentos.

-Em... Sí, ya te oí.-dije con calma.-Y yo ya te dije que tengo que irme a casa.

Una risa helada escapó de mis labios.

- Pero es que tú vas a ayudarme a solucionarlo - respondí - Por cierto, ¿Qué hechizo te gusta más: el Crucio, el Sectumsempra o el Diffindo?

El sectusempra me traía malos recuerdos, me habían obligado a usarlo contra Alex...

-Ninguno, no me gusta la violencia.-respondí. Cada vez estaba más confusa.-¿Por qué me preguntas eso?

- Porque estaba pensando en cual usar primero contigo - respondí sencillamente, apretando aún más el agarre por si se le ocurría escapar.

-¿Qué? ¿Me quieres hacer daño? ¿Por qué?-pregunté intentando soltarme, no me gustaba que me tocasen sin mi permiso. Sentía más curiosidad que miedo.

- Porque me gusta - contesté, sonriéndo con maldad - Y porque tengo hambre, ya te lo dije.

Saqué mi varita.

- ¿Sabes? Ya decidí que quiero usar el Diffindo - le conté como si fuera lo más normal del mundo - Porque así podré ir cortándote poco a poco... No tengo ninguna prisa.

Jamás pensé que podría existir alguien así en el mundo...
Podía sacar mi varita... Pero me estaba agarrando del brazo y al estar tan cerca me la podría quitar.

Tiene hambre, entonces... Vaya... Saqué mi varita y lancé un ''Lumus''. Aproveché la distracción y me separé de él.

-Fascinante... ¡Eres un vampiro!-exclamé con curiosidad.

Miré a la chica con aburrimiento, me había ido a topar con una víctima bastante estúpida.

- No me digas... me acabo de enterar - dije con sarcasmo mientras llegaba hasta ella en un abrir y cerrar de ojos y le quitaba la varita.

La lancé muy lejos.

- Algunos humanos sois tan tontos...

Nuevamente cogí su brazo con fuerza y lo levanté hasta la altura de mis ojos. Ella era bastante más baja que yo.
Luego lancé el Diffindo prometido y le provoqué un corte no muy grande pero si lo suficiente como para que sangrara.
Lamí aquel líquido vital.

- Bastante bien si...

No me molestaban los insultos, yo seguía asombrada.

Cerré los ojos con fuerza al sentir un corte en el brazo. Miré hacia él, se estaba bebiendo mi sangre y... ¿Le gustaba? Eso no era bueno, y mi varita no estaba conmigo ahora. ¿Qué hacía? Aparte de vampiros era mago. ¿Iba a morir? Por alguna razón, no sentí miedo, y me quedé quieta, mirando sus extraños ojos.

-Esa sangre es mía, no te permito que me la saques.-dije intentando soltarme. Aquel parecía un comentario tonto, pero no lo era, en mí estaba ante todo la educación.

Reí.

- Nunca nadie me había dado una excusa tan ridícula para que no lo matara - respondí.

Abrí entonces el corte con mis propias uñas, provocando que esta vez si se hiciera profundo y que más sangre manara de él. Volví a beber a la misma vez que mi fuerte agarre la impedía moverse.
¿Me daría algo de diversión aquella chica o se iba a quedar quieta mientras la mataba?

Solté un gemido bastante notable cuando me clavó las uñas. Ya no podía más, basta de cortesía.

Cerré los ojos con fuerza y con un gruñido lo aparté. Me había transformado en un león. Andé cojeando de una pata delantera hasta mi varita y cuando estuve a su lado, recuperé nuevamente mi forma humana y cogí mi varita.

Lo apunté aún sentada en el suelo.

-Desmaius.-murmuré, no era mi estilo gritar para decir hechizos.


(Perdona, mi personaje es animaga, pero aún no lo he puesto, me ha dado vagancia xD)

Ni me sorprendí cuando se transformó en un león, y cómo me esperaba que me atacase ya estaba saltando hacia otro lado incluso antes de que lanzara el hechizo.

- Genial, no sabes cómo me gusta jugar con la comida.

- ¡Expelliarmus! - lancé el hechizo con la rapidez propia de un vampiro.

-Protego.-dije moviendo la varita rápidamente. Hice una mueca de dolor, me dolía el brazo. Apunté hacia él con mi varita.-Episkey.-el brazo sanó. Solté un suspiro.

Jolín, si tuviera escoba... Pero no, y no sabía dónde habría una, por lo que no podría llamarla. Ni siquiera debía estar usando hechizos fuera de la escuela, me la iba a cargar...


(¿Me avisas cuando te vayas?)